Nada fino estuvo Antoine Griezmann, para variar, este sábado contra el Leganés. El atacante francés volvió a desaprovechar una oportunidad -otra más- de realizar una buena actuación, ver portería y así empezar a convencer a una afición en la que sólo siembra dudas. Su flojo partido en Butarque tan sólo sirvió para que el malestar del barcelonismo se acrecente, al no estar nada seguro de que 'Grizi' vaya a triunfar vestido de azulgrana.
El fichaje del francés costó 120 millones de euros al Barça y fue una apuesta impulsada por la junta directiva de Bartomeu, que ya había recibido 'calabazas' del futbolista galo un año antes. Se tomó la decisión de confiar en él pese al enfado de gran parte de la afición, y no puede decirse que la jugada haya salido demasiado bien por ahora.
Griezmann ha marcado cuatro goles con el Barça, los mismos que Arturo Vidal, y el Barça-Betis (5-2) ha sido hasta ahora el único partido en el que ha sido capaz de brillar. Ya hace más de dos meses de aquel encuentro, y las sensaciones con Griezmann no han mejorado nada, sino más bien al contrario. La falta de encaje del francés preocupa y recuerda cada vez más a la situación que vivió Philippe Coutinho en el último año y medio.
Contra el Leganés apenas jugó 54 minutos, y cuando vio su dorsal en el cartelón del cuarto árbitro se marchó al banquillo con cara de pocos amigos, sabedor de que acababa de desaprovechar otra oportunidad y de que, pese a sus intentos, las cosas siguen sin salirle en el Barça.
Griezmann, en una mala dinámica
El cambio le sorprendió, seguramente por el hecho de que llegara de forma tan temprana. Griezmann reaccionó con una media sonrisa irónica en forma de mueca, pero lo cierto es que no se le vio cómodo en ninguna posición del campo. Tampoco pudo brillar esta vez en la formación 4-2-3-1, ni en la banda derecha ni en la izquierda. Está claro que jugar pegado a la línea de cal no le gusta, y se nota en su juego.
La posición ideal para Griezmann habría sido la de mediapunta o segundo delantero, pero ahí estaba Leo Messi para intentar nutrir a sus compañeros de balones y generar jugadas peligrosas. Asistió 'La Pulga' a Luis Suárez en la jugada del primer gol, aunque tampoco brilló mucho más que Griezmann. El francés venía de mostrar un gran rendimiento con la selección 'bleu', pero una vez más se le apagó la luz en Can Barça. ¿Logrará cambiar la dinámica?