La sinceridad de Ronald Koeman llegó a un punto en el que molestó a los jugadores. Tras la victoria por la mínima ante el Eibar, este sábado, el entrenador dejó una indirecta en el aire con respecto al nivel de sus futbolistas, que no ha sentado muy bien al vestuario y creó cierta incomodidad en el ambiente durante el viaje de regreso a la Ciudad Condal.
“Cuando llegamos, cogimos la plantilla que había. El único fichaje fue el de Dest, el último día. Para mí no es una plantilla con el nivel que queremos para el Barça. Esto es así y mucha gente en el club piensa igual”, había dicho Koeman en Ipurua. Un día antes, también en rueda de prensa, pedía que se respetara a los jugadores. Un cambio de discurso que, sin duda, ha sido muy repentino y no ha gustado en Can Barça.
Según ha informado 'Sport', una parte del vestuario azulgrana tomó con cierto malestar y sorpresa sus palabras, no porque consideraran que Koeman los estaba criticando a ellos directamente, sino por el momento en el que llegó el mensaje. Los jugadores, que vivieron un final de temporada frenético y saben que cualquier cosa puede pasar en el verano por la revolución que quiere Joan Laporta, esperaban más apoyo por parte de su entrenador.
Porque, sí, es una realidad que la plantilla no da para más y que hacen falta muchos refuerzos para devolverle el brillo al Barça y que el equipo vuelva a ser competitivo, pero también es cierto que la responsabilidad debe ser compartida y, para los jugadores, Koeman y su staff técnico tienen mucho que ver en lo que pasó en la temporada y sobre todo en los grandes tropiezos en los partidos más importantes.
A su vez, y el punto más importante, es que los futbolistas azulgrana viven en una incertidumbre con respecto a sus futuros y, con esas palabras, aumenta más el desconcierto. Laporta ya avisó que no valdrá el ser una 'vaca sagrada' para quedarse en el club de cara a la próxima temporada, por lo que cualquier cosa podría pasar y deben 'cuidarse' las espaldas, también con Koeman.
Koeman quiso eliminar las asperezas
El neerlandés, que podría ser destituido, invitó a todos sus jugadores y cuerpo técnico a un desayuno en la Ciutat Esportiva el pasado domingo para hacer un cierre de la temporada y agradecerles por su trabajo y esfuerzo durante el curso. Aunque no trascendieron sus palabras, en concreto, el club reportó que Koeman les deseó suerte en sus compromisos con sus selecciones (en la Eurocopa, Copa América, Juegos Olímpicos y Europeo Sub21).
La intención del entrenador, nuevamente, fue eliminar todas las incorfomidades y asperezas que pudieron existir durante las últimas semanas, que fueron muy complicadas para el equipo tras bajarse del tren de LaLiga de forma inesperada y antes de lo previsto.