Koeman, sin alternativas, deberá confiar en la dupla Pjanic-De Jong

Sergio Busquets sufre un esguince leve del ligamento lateral externo de la rodilla izquierda, producto de la lesión con la selección española en la fecha FIFA. A pesar de que la Federación Española (RFEF) no especificó el tiempo de baja, todo indica a que será entre una semana y diez días, por lo que se perderá el compromiso de LaLiga Santander el sábado contra el Atlético de Madrid en el Wanda y el de la Champions League frente al Dynamo de Kiev el martes 24.

El centrocampista azulgrana, continuará bajo las órdenes de Luis Enrique hasta después del encuentro ante Alemania. Cabe destacar, que como con Ter Stegen, Koeman no forzará su recuperación hasta no completar de forzar cuatro o cinco entrenamientos. De esta forma, tendrá que buscar un reemplazo factible.

Como se ha visto en el sistema que utiliza Koeman, Busquets es uno de sus futbolistas claves, siendo titular en todos los encuentros disputados en LaLiga Santander. Pjanic deberá ocupar su puesto en el once titular; Aleñá, Riqui Puig y Sergi Roberto no se han ganado la confianza del director técnico aún.

Koeman tiene 11 jugadores con sus selecciones (Dest, Sergi Roberto, Lenglet, Pjanic, De Jong, Busquets, Messi, Griezmann, Pedri, Trincao y Braithwaite), 13 añadiendo a Iñaki Peña y el delantero Konrad de la Fuente, internacional con Estados Unidos junto con Dest.

Pjanic-De Jong, con números de garantía

En lo que va de temporada, De Jong y Pjanic han compartido durante 227 minutos. Asimismo, coincidieron también 15 minutos contra el Sevilla pero tacon Busquets en la medular, el dibujo táctico durante ese tiempo fue distinto. Contra el Dynamo de Kiev, el ex de la Juventus y el ex del Ajax salieron de inicio, pero el holandés ejerció de central y cuando pasó al centro del campo Pjanic ya había sido sustituido.

De esta forma, ambos han compartido el doble timón durante 76 minutos ante el Ferencvaros, 90’ frente a la Juventus, 12 contra el Villarreal, 4 ante el Betis y 45 en campo del Alavés. Durante esos 227 minutos, el Barça solo recibió un gol, y fue de penalti.