Hace algunos años que es la posición que el FC Barcelona siempre debe reforzar, pero por primera vez en mucho tiempo, hay menos inquietud respecto a los centrales. A pesar de que no sean todos de su elección, Ernesto Valverde cuenta con un grupo que mezcla juventud, calidad y experiencia, y empieza a trazar los planes para lo que será una temporada casi más exigente que la primera que vivió en el Camp Nou.
En el eje de la zaga del conjunto catalán todavía quedan deberes pendientes, y es que debe definirse quién es el cuarto hombre que formará parte del grupo y quién hará las maletas, aunque los roles están prácticamente definidos. Thomas Vermaelen sería el último en las rotaciones, y Yerry Mina estaría a punto de empezar la mudanza con la mirada puesta en la Premier League. Eso, si el reciente mensaje del míster no augura una última oportunidad para el de Guachené.
Mientras se decide si el colombiano se convierte en alternativa o se marcha cedido o traspasado, el belga vuelve a aparecer como importante en las previsiones de los culés. No sería el que más minutos tendría jugar, pero hace pocos meses demostró que puede aguantar un número aceptable de partidos consecutivos y que dentro de los esquemas azulgranas se mueve como pez en el agua. Podría acabar su etapa en la Ciudad Condal a lo grande.
Los galones, naturalmente, serán para la pareja por excelencia del Barça, Gerard Piqué y Samuel Umtiti. Ambos acabaron la pasada campaña tocados y han pasado por el Mundial, pero han tenido tiempo para refrescar las piernas y no hay dudas. Físico, toque, confianza y seguridad para la defensa, con un escudero joven en el que hay puestas muchas esperanzas. Este año no habrá que forzar tanto la máquina con los titulares.
Después de solucionar su fichaje con un 'clausulazo' para evitar más roces con el Sevilla, Clément Lenglet ya es uno más, y se ha marcado como objetivo no llevar colgando el cartel de suplente. Es evidente que el galo está en plena fase de adaptación y tendrá que ir entrando paso a paso, pero pretende dejar su sello desde la pretemporada, algo que tiene a tiro gracias a las ausencias de los mundialistas. Está preparado y tiene muchas ganas.
El Barça esperaría un año para buscar otro central
Con todo preparado para que empiece el curso 2018-19, ya se tendría el objetivo para el próximo verano. Si es Vermaelen quien cumple un ciclo y dice adiós al club, un hecho que a lo sumo se demorará otra campaña más, llegará otra vez un cásting para el cuarto central, aunque con algunas alternativas presentes. Habrá que ver si Yerry Mina está entre ellas, y si Matthijs de Ligt continúa entre las prioridades. Además, los jóvenes del filial empezarán a presentar candidatura, una carrera en la que, de momento, lleva ventaja Jorge Cuenca. No se dejará ningún detalle al azar.