La gran estrella del FC Barcelona, Leo Messi, llegó al partido de este martes contra el Slavia de Praga con la esperanza de volver a guiar a su equipo hacia la victoria, después de una muy mala tarde ante el Levante (3-1) el pasado sábado en tierras valencianas. No pudo hacerlo, sin embargo, y además el Barça ni siquiera logró mover el marcador en el Camp Nou.

Sin Luis Suárez por lesión, el tridente formado por Messi, Griezmann y Dembélé no carburó según lo esperado y a los de Valverde se les apagó la luz ante la portería de Kolar. Messi estuvo a punto de marcar en dos ocasiones al reventar un balón contra el travesaño y protagonizar otro disparo que fue desviado por el portero, pero al final no hubo novedades en el electrónico y el argentino se fue de vacío.

De esta manera, 'La Pulga' rompe una racha de cinco partidos consecutivos marcando, en los que había anotado seis dianas. Desde que se estrenase a nivel goleador frente al Sevilla el pasado 6 de octubre con un prodigioso lanzamiento de falta, fue capaz de marcar también ante el Eibar, el propio Slavia en Praga, el Valladolid y el Levante.

No era ni mucho menos su mejor racha goleadora, pero ahora deberá volver a encadenar partidos desde cero. Por ahora su techo está en 10 partidos consecutivos viendo puerta con el FC Barcelona, cosa que logró durante la temporada 2012-2013 (desde el 9 de diciembre del 2012 hasta el 27 de enero del 2013), anotando un total de 16 goles.

En aquella prolífica temporada llegó a marcar 60 goles, y ya tuvo un preludio de cinco partidos y 10 goles, producto de cinco dobletes consecutivos. La siguiente es otra racha de nueve partidos oficiales seguidos marcando: ocurrió en la temporada 2010-2011, con un total de 15 goles. Se trata, en definitiva, de unas rachas que Leo Messi ha ido encadenando de forma casi natural a lo largo de los últimos años. La más deslumbrante fue sin duda la que cosechó en la temporada 2011-2012, cuando fue capaz de transformar 18 tantos en tan sólo 8 partidos.

El Barça no puede depender solo de Messi en Champions

En Champions League, su tope está en el curso 2011-2012 cuando anotó 14 tantos en 11 partidos disputados, además de repartir cinco asistencias. De momento, y después de haber sido máximo realizador de la Liga de Campeones también la pasada campaña, con 11 dianas, en esta temporada 2019-20 sólo lleva un gol.

Las lesiones le hicieron perderse el primer mes y medio de competición oficial, y cuando volvió a jugar tuvo que coger de nuevo el ritmo competitivo para marcar las diferencias. Este pasado martes, contra el Slavia de Praga, fue de los pocos que se salvaron de la quema. El Barça no puede depender para siempre de un futbolista que lleva más de una década siendo el gran estandarte del equipo.