La primera se fue al travesaño. La segunda, ligeramente por encima de la portería. Y la tercera algo más desviada. Pero, a la cuarta, fue la vencida. Leo Messi marcó un auténtico golazo de falta, en el minuto 62 de partido contra Osasuna, para empatar en el Camp Nou y dotar al Barça de oxígeno cuando más lo necesitaba. Otro gol más para la galería que certifica que, en el Barcelona, Messi sigue siendo el principal (y a veces único) recurso.
El '10', cabreado consigo mismo y seguramente también con el rendimiento de su equipo, no celebró el gol y reaccionó con un gesto de rabia, chocando después la mano con Luis Suárez y los compañeros que venían a felicitarle. Con rostro serio durante la gran mayoría del encuentro, a Messi se le vio frustrado al saber que LaLiga Santander 2019-20 estaba perdida.
La diana del rosarino, en cualquier caso, es la número 23 que anota en Liga esta temporada, y que le permite seguir dos goles por encima del segundo máximo realizador del curso, Karim Benzema, que este jueves anotó dos tantos frente al Villarreal en Valdebebas.
El gol de Messi, a pesar de todo, fue inservible para los intereses de un FC Barcelona que perdió oficialmente LaLiga 2019-20, después de haber ganado ocho de las últimas once ediciones. Con mucha polémica arbitral de por medio, el Barça se queda sin un título que Messi ansiaba volver a ganar este curso, y cuya pérdida posiblemente motive más a los culés para echar el resto en Champions League.
El Barça necesita mantener el ánimo a flote
Si bien es cierto que los blaugrana no serán favoritos en Liga de Campeones, al menos intentarán llegar lo más lejos posible. Y paso a paso, como ha hecho el Real Madrid en anteriores campañas, se espera que el equipo de Quique Setién consiga meterse en una final de Lisboa que podría convertir en éxito lo que, a día de hoy, parece una temporada decepcionante.
A sus 33 años, Messi sabe que no le quedan muchos cursos más en la élite con el FC Barcelona. De ahí que se frustre cuando no logra los objetivos, y cuando ve que el equipo no dispone del fondo de armario ni los recursos necesarios para ello. Ahora que el barco se ha hundido en Liga, tocará seguir remando en Champions League. Y en lo que esté por venir...