Sin embargo, el hecho de que empezase desde el banquillo tiene otra explicación bien distinta. Ernesto Valverde y Leo Messi pactaron que el delantero argentino empezaría el partido desde el banquillo para saltar al campo aproximadamente tras una hora de partido, cuando la Juventus estuviese más desgastada.
La decisión de ambos empezó a tomar forma tras el empate del Atlético de Madrid y el Real Madrid en el derbi que enfrentaba a ambos en el Wanda Metropolitano la pasada semana. Los dos equipos madrileños, aspirantes al título de LaLiga, se quedaban a diez puntos, dejando como máximo perseguidor al Valencia, próximo rival del FC Barcelona.
Conversación tras el derbi
Tras tomar una ventaja tan importante en LaLiga, Leo Messi y Ernesto Valverde mantuvieron una conversación. En ella, llegaron a la conclusión que era la hora de dar el gran golpe en la competición doméstica, vencer en Valencia y quedarse líderes a siete de ventaja.
Para ello, se llegó a la conclusión de que Messi tenía que llegar fresco al partido de Mestalla. El partido de la Juventus, en ese caso, ya no era el primero en el esquema de prioridades debido a la favorable situación del Barcelona en la fase de grupos, por lo que el argentino y el 'Txingurri' pactaron que no jugaría la primera hora en Turín.