Según Fabrizio Romano, periodista especializado en fichajes, Leo Messi levantará el próximo Balón de Oro, una decisión que se dará a conocer la noche del lunes 30 de octubre de 2023 en París. Aunque no sea oficial, todo apunta a que el astro argentino ampliará su palmarés con otro trofeo individual. El exjugador del Barcelona lidera las votaciones para conseguir el que sería su octavo galardón.
Hace algunas semanas, el diario 'Sport' también confirmó quienes serían los ganadores del próximo Balón de Oro masculino y femenino. El periódico español puso encima de la mesa a dos nombres: Aitana Bonmatí, centrocampista del Barça y de la Selección Española, y Lionel Andrés Messi, futbolista del Inter de Miami y de la Selección Argentina. Para la de Ribas (Cataluña, España) sería el primero, mientras que para el capitán de la albiceleste el octavo.
Los méritos de Messi para ganar el octavo Balón de Oro
La consecución del Mundial ha puesto el nombre del '10' en la lista de nominados a ganar este premio individual. Hace menos de un año, Leo se coronó como campeón del mundo ante la Francia de Kylian Mbappé. Los argentinos se impusieron por 4 a 2 en los penaltis a los franceses. Albicelestes y 'bleus' protagonizaron una auténtica oda al fútbol, convirtiendo la final en la mejor de la historia de los mundiales. El capitán de la Selección Argentina logró el ansiado título con grandes actuaciones que serán recordadas para la historia.
El exfutbolista del Barça volvió a ser ese jugador capaz de condicionar el plan de partido del rival. Los hombres de Scaloni se encomendaron a su capitán y líder para que los llevará hasta el deseado título. Messi, que llegó al Mundial con 35 años y en el tramo final de su carrera, tenía la presión de todo un país que hace un año había celebrado la conquista de la Copa América. El exjugador del PSG estaba ante el mayor desafío de su carrera. Levantar el trofeo de campeón del mundo era poner la guinda del pastel a una carrera irrepetible e inmejorable.
Messi no necesitaba este trofeo para ser considerado el mejor de la historia. A sus 35 años ya había ganado absolutamente todo y su huella en el fútbol ya era imborrable. El Mundial de Catar significó, entre otras cosas, la redención de un futbolista que luchó contra las críticas y dudas de su propio país y se elevó al cielo como Maradona cuando se consagró campeón del mundo. La Pulga se consolidó durante el Mundial como un auténtico líder dentro y fuera del campo. Elegido mejor jugador de la final, se afianzó como el mejor jugador del torneo (MVP del Mundial con 7 goles y 3 asistencias). Mbappé, la otra gran estrella del campeonato, que brilló en la final con tres goles (dos de penalti), terminó como máximo anotador (8 goles).