Leo Messi salió 'juguetón' contra el Getafe y en los primeros diez minutos dejó un golazo y un disparo espectacular que estuvo cerca de ser otro. El '10' demostró una vez más por qué es el mejor del mundo y en el 8 anotó un tanto con el que seguir ampliando su leyenda en el FC Barcelona. El argentino anotó su diana número 666 con la elástica del conjunto barcelonista para perforar la portería 'azulona'.
El delantero del Barça recibió un gran pase de Sergio Busquets a la espalda de la defensa del 'Geta' dejando al rosarino solo en carrera. El capitán blaugrana condujo con velocidad y mucha clase, aguantó un fuerte empujón de Djené que podría haberle costado la roja, y definió con maestría ante David Soria con un zurdazo marca de la casa. Un golazo del 'crack' para adelantar a los suyos momentáneamente.
Antes de ese jugadón, el astro de Rosario estuvo a centímetros de meter el 1-0 con un trallazo desde la frontal del área que se fue al larguero. Leo vio un resquicio en la defensa de los getafenses y buscó su clásico tiro de rosca con un gran tiro que llegó a botar en la línea después de tocar en la madera. La tecnología no dijo nada, así que el balón no entró, pero se quedó a muy poco de hacerlo.
Por desgracia para Messi, su equipo no estuvo a la altura de él tras su diana. El Barcelona se despistó poco después de la diana del 'capi' y el Getafe lo aprovechó para empatar el partido tras una buena jugada entre Take Kubo, Maksimovic y Marc Cucurella. 'Cucu' la puso desde la izquierda con potencia y Clément Lenglet se la metió en propia puerta con la mano tras el remate de Ángel Rodríguez.
El Getafe 'regaló' el 2-1
Por suerte, el Getafe compensó el infortunio que tuvo el Barça tras el tanto en propia del zaguero galo. Sofian Chakla no se entendió con su portero en una jugada aparentemente fácil y dio la pelota hacia atrás sin mirar a Soria. El arquero andaluz había salido de su portería para atrapar la pelota con las manos, por lo que el pase del central se fue directamente al fondo de la red para 'regalar' el 2-1.