Golpe de autoridad: Neymar Jr, por delante de Leo Messi para los penaltis

Con el tridente estrella, Leo Messi, Neymar y Kylian Mbappé, el París Saint-Germain tiene a tres excelentes cobradores de penales. Existía la duda de quién será el encargado de lanzar las penas máximas, pero en la victoria del PSG 'in extremis' frente al Olympique de Lyon de este fin de semana, han dado una 'prueba' o una declaración de intenciones, en cualquier caso. 

En el Parque de los Príncipes, después de que Paquetá abriera el marcador, los de Mauricio Pochettino se lanzaron al ataque y, de tanta presión, Neymar Jr terminó provocando un penal. La expectativa era máxima, porque Leo Messi podía estrenarse como goleador de 'les parisiens' en su tercer partido, pero su amigo y compañero 'Ney' dio un golpe de autoridad.

El carioca es quien lanza los penaltis en el PSG, incluso por delante de Mbappé, pero se esperaba que le 'regalara' la oportunidad a un Leo Messi que había firmado varias chances claras en el primer tiempo y que estaba ansioso de estrenarse en el Parque de los Príncipes. La historia no fue así y, con calma, 'Ney' batió a Lopes. 

El '10' del PSG no cogió casi carrera, se fue frenando y lanzó un remate raso ligeramente a su derecha. Antes, su compatriota Paquetá había hecho señas a Lopes para que se lanzara a la izquierda. El guardameta, confiando en la recomendación, falló y 'Ney' celebró su primer tanto de la temporada con el conjunto dirigido por Mauricio Pochettino. 

¿No cobrará Messi los penales? 

Ahora quedará ver si 'Ney' cederá algún lanzamiento a su compañero Messi, quien en el FC Barcelona acostumbraba a cobrar todos los penales. De hecho, con Argentina y el cuadro azulgrana anotó un total de 101 goles desde los once metros, mientras que ha fallado 29. El penúltimo, de hecho, fue ante el PSG en los octavos de final de la Champions League pasada. 

En el minuto 45, Keylor Navas detuvo el lanzamiento de 'La Pulga', aunque existió mucha polémica porque el costarricense se había adelantado en la línea. No obstante, terminó frustrando la alegría del argentino y empujó aún más a su equipo para conseguir el ticket directo a los cuartos de final.