Jorge Messi, padre y representante de Leo, aterrizó este miércoles por la mañana en el aeropuerto del Prat. La prensa estaba esperando al argentino, que no dejó ningún titular y se limitó a hacerse el despistado. "No sé nada, muchachos", dijo ante el aluvión de preguntas sobre el futuro de su hijo. Poco después, se marchó en un taxi a las oficinas que tiene en Barcelona y fue en ese lugar donde decidió 'mojarse'.
'Deportes Cuatro' estaba esperando al agente del rosarino en la puerta de su despacho y captó a Jorge metiendo aún más miedo a todos los culés. El padre del '10' del Barça insistió en el mensaje que se está mandando desde hace una semana y dejó claro que Leo quiere marcharse del conjunto barcelonista y que su continuidad es muy difícil. "Es complicado que Leo se quede en el Barcelona", aseguró.
Antes de subir a su oficina, el padre del mejor jugador del mundo también aclaró que no ha hablado directamente con ningún representante del Manchester City, ni siquiera con Pep Guardiola. "No sé nada del Manchester City y no he hablado con Pep Guardiola", destacó ante la insistencia del periodista. Tras estas palabras, el representante subió a su despacho para reunirse con los abogados del delantero.
Esta tarde, él y Josep Maria Bartomeu tendrán la reunión que podría decidir el futuro del seis veces Balón de Oro. El presidente del Barça y Jorge Messi se reunirán para tratar la situación del atacante, que ahora mismo se encuentra en rebeldía y que no tiene pensado cambiar de plan. Leo quiere marcharse sea como sea y su padre intentará convencer al máximo mandatario blaugrana para que le abra la puerta y le ponga precio.
No obstante, el directivo catalán no tiene ninguna intención de negociar y si quiere reunirse con el padre de Messi es para dejárselo claro. Él insistirá por enésima vez en que los culés no quieren traspasarle y que su libertad cuesta 700 millones de euros, que es su cláusula de rescisión. Además, aclarará que el '10' tiene contrato hasta 2021 después de que expirara el 10 de junio la cláusula que le permitía quedar libre, algo que los abogados del futbolista niegan y que Jorge también hará.
Messi quiere que Bartomeu ponga un precio razonable a su salida
La misión del agente del capitán azulgrana es como mínimo salir de la cumbre con un precio pactado para su venta. El objetivo de los Messi es marcharse gratis, pero en caso de no poder, podrían conformarse si el Barcelona aceptara un traspaso por un valor de 100 o 120 millones de euros, que es más o menos su precio de mercado según 'Transfermarkt'. En principio, Bartomeu rechazará esta demanda, pero todo podría pasar a estas alturas.