En un encuentro donde el FC Barcelona volvió a demostrar que sigue con la pólvora mojada y no ve puerta, apareció Lionel Andrés Messi para volver a transformar de falta directa otra obra de arte que supuso el empate de los suyos ante el Villarreal. El diez volvió a aparecer, como hace siempre, para por lo menos rascar un punto y quedarse a cinco del Real Madrid.
Ese gol y el peligro constante que llevó en sus botas durante los 90 minutos le han llevado a ser el MVP del FC Barcelona frente al Villarreal. Leo Messi demostró que, a pesar de que sus compañeros en ataque se encuentren en un problema de baja forma, él sigue estando para todo lo que se le necesite.
Antes de clavar la falta en la escuadra en el minuto 89 ya había estampado otro esférico en el palo largo de Sergio Asenjo. Una jugada que vino precedida de una flagrante mano de Bruno Soriano dentro del área que Iglesias Villanueva no concedió. El centrocampista "groguet" evitó que el propio Leo pudiera alojar con otro disparo el esférico en el fondo de las mallas.
Además de goleador, Messi fue asistente
El delantero también se dedicó a filtrar pases hacia sus compañeros. Dejó a Neymar solo en varias ocasiones, también a André Gomes pero estos no supieron anotar ningún gol. Finalmente, su gol salvó un punto y le encumbró en la primera posición de la tabla de máximos goleadores de la competición, con catorce goles.