Lionel Messi ha regresado a entrenarse este lunes con el París Saint-Germain tras el revuelo ocasionado por haber viajado a Arabia Saudí por compromisos publicitarios sin permiso del club la pasada semana. Esto provocó que el club francés le impusiera una sanción de al menos 15 días, llegando a parecer incluso que podía no volver a vestirse de corto con el actual líder de la Ligue 1, pero una disculpa pública fue lo que cambió su situación.
El pasado viernes, el rosarino publicó en Instagram un vídeo en el que pedía perdón al club y a sus compañeros por haberse ausentado del entrenamiento del pasado lunes. Esta publicación ha hecho que el ex capitán del FC Barcelona volviera a ejercitarse con el PSG, como lo confirmó en las redes sociales el conjunto parisino, desde el Camp des Loges.
Unas palabras que sí han tenido el efecto esperado
"Quería hacer este vídeo ante todo lo que está pasando. Primero de todo, pedir perdón a mis compañeros y al club. Sinceramente pensé que íbamos a tener libre después del partido, como venía pasando durante las semanas anteriores. Tenía organizado este viaje a Arabia, el cual había cancelado anteriormente y en este no pude" apuntaba el argentino en un vídeo publicado en sus redes sociales.
El exjugador azulgrana, que apunta nuevamente su futuro al Spotify Camp Nou, no jugó este domingo contra el Troyes, en el primero de los dos encuentros que iba a perderse después del castigo que le habían impuesto. En principio tampoco iba a competir contra el Ajaccio, el sábado en el Parque de los Príncipes, pero esta vuelta a los entrenamientos cambia completamente su situación.
El cambio en París parece inminente
El fin de semana podría reencontrarse con los ultras parisinos, que le dedicaron la semana pasada graves insultos y le pidieron que se dejara la capital francesa cuanto antes. Esta situación tiene al equipo galo en medio de una importante crisis, la cual apunta a intentar resolver con una revolución en verano, tanto en plantilla como en el propio banquillo galo.