Messi rompe la maldición: De 'pecho frío' a héroe de Argentina

La quinta fue la vencida para Leo Messi. Esta vez el título con Argentina no se le resistió, como había pasado en 2007, 2014, 2015 y 2016. 'La Pulga' ha conseguido, finalmente, cumplir uno de sus sueños, en un momento muy importante en su carrera (con dudas respecto a su futuro) y con la intención de regalarle lal mayor de las alegrías a su país, Argentina, que no celebraban un trofeo desde hace 28 años.

En una Copa América marcada por la pandemia del coronavirus, la improvisación y restricciones, Messi ha levantado un título con la absoluta, tras vencer a Brasil en el Maracaná por 1-0. En el torneo, fue el jugador más determinante, interviniendo directamente en nueve tantos para la albiceleste (4 goles y 5 asistencias), además de ser fundamental para que Argentina llegara a la final por su gran influencia en el juego ofensivo de los suyos.

Sus lágrimas y emoción tras el enfrentamiento fueron la confirmación que el camino ha sido complicado y lleno de obstáculos, pero ha tenido la recompensa esperada. Sudamérica es albiceleste y Leo Messi es, sin duda, el gran responsable de ello. Se vistió de líder, más que nunca, para romper la maldición de Argentina en los torneos y para quitarse, de golpe, la etiqueta de "pecho frío" que muchos se han encargado de imponerle en los últimos años. Es la gloria para Leo, más que merecida, pero antes de eso tuvo que sufrir bastante. 

En 2007, con apenas 20 años, se llevó el primer golpe. En su segundo gran torneo con la absoluta, Messi dio las primeras cinceladas de su fútbol, con exhibición incluida, para llevar a Argentina a la final de la Copa América Venezuela. No fue suficiente, sin embargo, porque se enfrentaron a una Brasil insuperable que les castigó con un 3-0. Siete años después, en 2014, volvió a una gran final y la decepción fue aún mayor. 

En la Copa del Mundo de Brasil, Messi volvió a ser clave y la albiceleste alcanzó la final para sumar la tercera estrella en la camiseta, pero un gol de Mario Götze arruinó el sueño de todos los argentinos. Fue, sin duda, el golpe más duro para 'La Pulga' y todos sus compañeros, quedándose a las puertas de hacer historia en la casa del eterno rival. 

Pesadilla ante Chile y... Esperar la gloria

Si la final de 2014 había sido dura y difícil de digerir, peor lo fue las dos derrotas consecutivas en la Copa América, en la gran final, ante Chile, ambas definidas desde el punto penalti, En 2015 y 2016 (por la edición centenario), los lanzamientos desde los once metros castigaron a Argentina. En la última edición, Messi falló su disparo y anunció que se retiraba de la selección: “Para mí se terminó la selección. Ya lo intenté mucho, me duele no ser campeón con Argentina. Me voy sin lograrlo. Es increíble, pero no se nos da. Hoy nos pasó otra vez y otra vez los penales. Son cuatro finales las que me tocó perder, tres seguidas. La verdad que es una lástima, pero tiene que ser así”, dijo.

La buena noticia es que no terminó bajándose del barco y siguió peleando por su sueño. Después de tantos "no", de tantas lágrimas de rabia y decepciones, Messi, el 'pecho frío' llevó a los suyos al cielo... Y esta vez el fútbol, por justicia o no, le sonrió y recompensó por todo lo que le ha dado al deporte.