En mitad de la controversia por el nulo descanso que está teniendo Leo Messi esta temporada 2017-18 -lo ha jugado todo con el FC Barcelona y con Argentina-, en las últimas horas se ha sabido que el rosarino ni siquiera podrá tener descanso durante el próximo parón de selecciones de noviembre, pese a haber clasificado a la albiceleste para el Mundial de Rusia 2018.
El presidente de la Unión de Fútbol de Rusia (UFR), Vitali Mutkó, ha confirmado un amistoso entre Argentina y Rusia para la inauguración del estadio Luzhniki, que será sede de la final del Mundial 2018, tal y como puede leerse en la página oficial.
El compromiso en cuestión está previsto para el próximo 11 de noviembre, por lo que Leo Messi tendrá que volver a viajar con la albiceleste para disputar un partido totalmente intrascendente. "Messi participará en el partido", aseguró Mutkó, después de haber alcanzado un acuerdo con la AFA en el que se desconoce si Messi ha tenido voz y voto.
Contar con la presencia del mejor jugador del mundo, Leo Messi, para la reinauguración del estadio moscovita era un gran anhelo de la dirigencia rusa. Sin embargo, el hecho de que Messi lo esté jugando completamente todo esta campaña 2017-18 podría acabar provocando algún tipo de lesión o, en su defecto, una bajada de ritmo del argentino en las próximas fechas.
Messi necesita descanso, como todos
No conviene romper la joya de tanto tocarla. Por ello es posible que Ernesto Valverde, con esta información sobre la mesa y en algún partido que ya esté resuelto por el FC Barcelona en el marcador, decida sustituir a Leo Messi para que tenga minutos de descanso. El partido del próximo sábado contra el Málaga, si el Barça consigue rápidamente una buena renta de goles en el Camp Nou, podría ser una buena oportunidad.