El FC Barcelona cambió su historia como club un 16 de noviembre de 2003. Aquel día, en Oporto, ingresó al campo Lionel Andrés Messi por primera vez como jugador del primer equipo azulgrana y marcó un antes y un después en la entidad catalana, además de hacerlo por supuesto en todo el mundo del fútbol. En un amistoso frente a los lusos, el rosarino ingresó cerca del minuto 80, completando así un gran 'viaje' que inició en la Masia con 13 años y terminó, desafortunadamente, en el verano de 2021 con su amarga salida de la Ciudad Condal.
Con aquella recordada segunda equipación del Barça de la 2003/2004, y con el dorsal 14 a la espalda, Messi sustituyó a Fernando Navarro en Do Dragâo el día de la inauguración del nuevo estadio del Porto. Desde aquel día el argentino demostró que todos los comentarios que venía produciendo en la cantera azulgrana eran una realidad al demostrar algunas cuestiones de 'crack' con sus apenas 16 años.
Messi y un proceso de crecimiento francamente indetenible
El míster de aquel momento, el neerlandés Frank Rijkaard parecía saber muy bien el proceso que debía seguir Leo y confió en darle sus primeros minutos en aquel amistoso para comenzara a sentirse ya cerca del primer equipo, aunque ciertamente su debut llegaría ya en el 2004, unos 11 meses después. Sin embargo, la llegada de Messi al primer equipo hace 20 años no hizo sino demostrar el gran trabajo del Barça en la Masia y su confianza en el talento de los jugadores que formaba, a pesar incluso de no ser españoles o catalanes, como el caso de Leo.
20 años después de aquel debut del '10' argentino parece quedar claro que la historia se ha escrito 'sola'. Leo Messi es considerado el mejor jugador de todos los tiempos y, obviamente, el mejor futbolista que ha vestido la camiseta azulgrana del Barça. Sus números, tanto individuales como colectivos, lo confirman de forma rotunda, a pesar de que la historia entre ambas partes no va a concluir de la forma que muchos esperaban a medida que fueron pasando los años.
La carrera de Messi en el Barça fue simplemente inigualable
Finalmente, el campeón del mundo disputó 17 temporadas defendiendo los colores del primer equipo del Barça. En todos esos años, disputó 778 partidos, convirtiéndose en el jugador que más ha defendido la camiseta culé, marcando la absurda cantidad de 672 goles, con un ratio de 0,86 goles por partido, además de ganar todo lo que se puede ganar en el mundo del fútbol como futbolista del club catalán.
Desde aquel debut en Oporto hasta su marcha hace poco más de dos años, el palmarés de Messi con el Barça se cerró con 10 Ligas, cuatro Champions League, siete Copas del Rey, ocho Supercopas de España, cuatro Supercopas de Europa y tres Mundiales de Clubes de la FIFA. Además, el astro argentino también tiene en su poder ocho Balones de Oro -siete de ellos como culé- y seis Botas de Oro como el máximo goleador de LaLiga, así como varios tres premios individuales como mejor jugador del año en Europa.