Si no estaba Messi estaba Suárez y si el uruguayo no llegaba a ese desmarque o a ese pase, aparecía Neymar Júnior para hacer magia y cambiar los marcadores cuando el respetable parpadeaba. Si la pasada 2014-2015 la delantera del Barça fue parte importante de los triunfos del equipo, en esta 2015-2016 ha sido imprescindible para todos ellos donde ya han llegado a los 252 goles juntos. Y, cómo no, la Liga BBVA 2015-2016 no ha sido una excepción.
Así es como primero era Leo Messi el que llevaba la voz cantante en los goles del equipo, con Neymar como gran escudero y Suárez buscando su oportunidad, creando espacios y combinando de la mejor de las maneras con los otros dos cracks. Pero la tragedia llegó al corazón del barcelonismo con la lesión del mejor jugador del mundo el pasado 27 de septiembre, en el fatídico partido ante la UD Las Palmas.
"No pasa nada", se dijo un hombre que lleva tatuado a fuego y sangre en sus venas el nueve que luce a cada partido en sus espaldas. Ese Luis Suárez que comenzó levantando los ánimos del equipo. Frente al equipo canario anotó los dos goles de la victoria, no estuvo muy activo en la derrota posterior en Sevilla pero sí que respondió junto a "Ney" frente al Rayo, donde marcó un gol y el brasileño los otros cuatro, pero sobre todo la velocidad de crucero la cogió el atacante charrúa en su "hat-trick" frente al Eibar.
Una velocidad que le ha llevado a conseguir los 40 goles que le han hecho "Pichichi" del campeonato liguero y la Bota de Oro del continente europeo. Junto a él, Neymar ha aportado 24 goles y un puñado de asistencia, igual que un Messi que tras recuperarse de la lesión volvió por sus fueros y acabó el campeonato con 26 tantos anotados. Los tres han mantenido una relación fraternal que les ha llevado a volver a alzar por segunda vez consecutiva el campeonato liguero… ¡Y los que quedan!