Luis Suárez habló en un programa de su país después de la derrota del FC Barcelona ante su Atlético de Madrid. El charrúa se refirió al encuentro y también a la situación de su amigo y ex compañero, Leo Messi, del que se está hablando mucho. Además, también reconoció estar pasándolo mal lejos de su familia estos días, ya que está aislado por haber contraído el coronavirus durante el parón de selecciones.
El '9' colchonero lamentó lo que está viviendo el '10' azulgrana, aunque admitió que cree que logrará darle la vuelta a la tortilla antes o después. "Como compañero y amigo de Leo me duele la situación, me preocupa como ser humano, pero también sé que está capacitado para salir adelante y dar vuelta a la situación", afirmó, restándole importancia a las críticas que está recibiendo el rosarino.
Por otro lado, explicó cómo vivió el choque entre culés y rojiblancos desde la distancia. "Fue una inyección de energía positiva enorme. Durante el partido dejé el teléfono a un lado y mi mujer me llamó a la hora, más o menos, y estaba preocupada porque siempre le estoy contestando constantemente, y en ese momento no lo había hecho. Es que estaba tan pendiente del partido que no miraba el teléfono", declaró.
El de Salto siguió con su discurso e insistió en lo mucho que disfrutó viendo a los suyos. "Estaba tan metido en lo que pasaba en la cancha, que no le daba importancia al celular. Eso es lo que me generaba ver al equipo", dijo, confirmando también que ve a los suyos yendo a por los grandes títulos. "Lo disfruté muchísimo porque es una demostración más de que podemos pelear por grandes cosas", destacó.
También quisi poner en valor a su entrenador, el Cholo Simeone, al que alabó y colocó entre uno de los mejores técnicos del mundo. "El Cholo Simeone, por lo que transmite, por su forma de convencer al jugador, es espectacular. No me sorprende porque desde fuera ya te dabas cuenta, pero desde dentro estoy disfrutando de un entrenador que se valora muchísimo a nivel mundial", señaló.
Suárez, dolido por su situación personal
Por último, se lamentó por lo que está viviendo en estos momentos por culpa del coronavirus. El charrúa está aislado, sin su familia, y se le está haciendo muy complicado vivir así. "Como padre la estoy pasando realmente mal. Me toca no poder ver a mi familia luego de estar muchos días concentrado. Estoy encerrado en un apartamento. Mis hijos no sabían que había venido y me visitaron desde una ventana a 50 metros. Se hace muy difícil", finalizó.