Luuk de Jong ha sido uno de los protagonistas silenciosos del FC Barcelona en esta temporada. El neerlandés ha aparecido en varias oportunidades para 'salvar' al cuadro azulgrana con goles en el último minuto o acciones para dar la victoria o algún punto a los culés. Ahora, se ha confesado sobre lo complicado que ha sido demostrar que es importante en este equipo.
En una entrevista al medio neerlandés 'NOS', Luuk habló sobre la oportunidad que tuvo de marcharse al Cádiz CF en enero hasta el final de temporada: "Personalmente, siempre supe que quería terminar la primera temporada en el Barça. Me mudé a Barcelona, así que no quería irme a otro lugar hasta después de unos meses", destacó.
Asimismo, habló de cómo ha sido su proceso de adaptación y evolución en el Camp Nou, destacando que "con Ronald Koeman, tenía que demostrarme a mí mismo todos los días en los entrenamientos. En mi opinión, cuando no te va bien en los entrenamientos, no mereces jugar partidos. No ha cambiado mucho para mí después de la marcha de Koeman. Tengo que hacer lo mismo. Él sabía quién soy y cómo jugar".
Sobre cómo ha sido su experiencia desde la llegada de Xavi al banquillo blaugrana, apuntó que "tuve que demostrarle que podía ayudar a este gran club. Tenía que demostrarle desde el primer momento mi calidad y lo que tengo para ofrecer al equipo, lo que puedo hacer en este gran club, que podía ayudar al equipo en definitiva”, sentenció. Xavi lo ha 'bautizado' como el gran revulsivo del Barça cuando más atascado están los partidos.
"Hace falta trabajar en equipo"
El internacional con Países Bajos ha subrayado, por otra parte, que es muy diferente el Barça desde afuera a cómo se vive dentro del club: "cuando vine aquí sabía que venía a uno de los clubs más grandes del mundo. A pesar de eso, me sorprendió la calidad de los jugadores y lo fáciles que resultaron algunas cosas. Cuando miras al Barça de lejos, piensas: 'Qué gran equipo que gana todos los partidos'. La verdad no es así, hace falta trabajar en equipo para ser un equipo cohesionado. Con esta calidad y trabajo duro, podemos formar un grupo fuerte”.
Reconoció, además, que en el vestuario del Barcelona le recibieron muy bien porque le conocían de antes: “¡Ja, ja! Creo que sí. Contra ellos jugué los dos años que estuve en el Sevilla y marqué goles. Creo que conocen mi calidad y cómo beneficiarse de mis servicios", elogiando finalmente a Sergio Busquets, capitán culé: "en el juego de posicionamiento, tenemos que tomar decisiones rápidamente para llegar al nivel más alto posible. Cuando jugué contra Busquets, dije lo molesto que es. Cuando me convertí en un compañero de equipo dije que es una persona maravillosa, un buen líder”.