El mejor partido de Coutinho con el Bayern: ¡Tres goles y dos asistencias!

El mercado de fichajes espera que los clubes decidan sobre su futuro, pero Philippe Coutinho sólo quiere disfrutar jugando a fútbol. El brasileño presionó para dejar el Liverpool porque soñaba con jugar en el FC Barcelona, donde su falta de adaptación le pasó factura. Tras una temporada y media de altibajos, el atacante acabó cedido en el Bayern de Múnich, donde se esfuerza en demostrar que sigue siendo una estrella.

Las dudas que los germanos expresaban hace unos días sobre su opción de compra se deshicieron este sábado contra el Werder Bremen, cuando el carioca puso patas arriba el Allianz Arena. Los fantasmas de la Bundesliga volvían a rondar a los de casa tras cerrar con récord histórico la fase de grupos de la Champions, pero cuando peor se ponía el panorama, apareció el ex del Inter de Milán para liderar una remontada.

Aunque los de Hansi Flick mandaron desde el principio, Milot Rashica puso a los visitantes en ventaja. Las derrotas ante Bayer Leverkusen y Borussia Mönchengladbach empezaron a hacerse grandes cuando el albanés selló una contra eléctrica, en la que recibió un balón en el centro del campo, lo orientó con un control, dejó retratado a Jérome Boateng y tras llegar a la frontal, fusiló a Manuel Neuer con un trallazo que le atravesó.

Robert Lewandowski, Serge Gnabry y el propio Coutinho probaron suerte antes y después del gol, pero les frenó el inspiradísimo Jiri Pavlenka. El cancerbero había plantado una muralla en su portería que los bávaros trataban de derribar, y lo consiguieron al filo del descanso gracias a los primeros chispazos del ex azulgrana. Primero el de Stuttgart llegó un segundo antes que el checo para lanzar un pase de la muerte, que el de Río remató a puerta vacía. Después, este habilitó con un pase picado al polaco, que batió al arquero por debajo de las piernas.

Coutinho da espectáculo en Múnich

En la reanudación no se detuvo el espectáculo de Coutinho, que se convirtió en el absoluto protagonista de la jornada. El dominio de los muniqueses era incluso mayor, y pasada la hora de encuentro llegó el 3-1 en una jugada magistral. Al gran pase de David Alaba respondió el brasileño con un control de quilates, y casi girado, con el exterior, conectó una preciosa y precisa vaselina que acabó con el cuero en las redes.

Los verdiblancos amenazaron con recortar a la contra, y el Bayern sentenció con tres dianas en apenas seis minutos. El siguiente en apuntarse a la fiesta fue Thomas Müller, que regaló una pared a Lewandowski para que este siguiera avanzando hacia la Bota de Oro. Sin apenas respiro, el hombre del partido penetró en área pequeña, cedio atrás y allí apareció el alemán, que añadió su celebración a las de sus compañeros.

Y para sellar un día para el recuerdo, Coutinho puso fin a un duelo con tres tantos y dos asistencias con golazo marca de la casa, de aquellos que se ven en cada equipo en el que está. Ivan Perisic le dio un balón en el pico del área y no hizo falta más. Derechazo con efecto que tocó en el palo y acabó dentro, poco antes de que le sustituyeran y dijera adiós entre aplausos. Esta vez sí, este es Philippe Coutinho.