Adama Traoré no solo se reencuentra con compañeros con los que jugó en el FC Barcelona durante su primera etapa como azulgrana. El caso de Gerard Piqué, Sergio Busquets o Jordi Alba, sino también con un Martin Braithwaite con el que ya compartió vestuario en el Middlesbrough de Inglaterra en la temporada 2017-2018, unos años después de que emprendió el reto de jugar en la Premier League tras no conseguir suficientes minutos en tierras catalanas.
En esa temporada, el actual club de la Championship aún militaba en la Primera División inglesa y tanto Adama como Braithwaite llegaron a coincidir en el Riverside Stadium. Fueron muy pocos meses, sin embargo, debido a que el delantero danés hizo las maletas muy pronto, en el mes de enero, para marcharse a Francia en calidad de préstamo al F. C. Girondins, donde jugó seis meses. Para el comienzo de la 18-19, el danés regresó al cuadro inglés, pero terminó jugando en el Leganés antes de dar su paso al FC Barcelona en enero de 2020.
Aunque Braithwaite nunca consiguió despuntar en el cuadro inglés, quien sí lo hizo fue Adama. En su caso, recaló en el equipo inglés en 2016 tras el descenso del Aston Villa. En la siguiente temporada, la 2017-2018, fue un jugador clave para el equipo, con registros de 40 partidos, cinco goles y 12 asistencias. En ese año fue catalogado como el mejor regateador de toda Europa, tras conseguir el 70% de acierto en 194 intentos, por delante de Hazard y Allan Saint-Maximin. Al final de ese curso, fichó por el Wolverhampton.
Adama regresa al Barça
Después de siete años, Adama Traoré vuelve a su casa. Se ha convertido en el tercer fichaje del FC Barcelona en esta ventana de transferencias invernal y llega para 'reemplazar' a un Ousmane Dembélé que no volverá a jugar con el equipo azulgrana después de haber decidido no extender su contrato más allá del 30 de junio del presente año. Los azulgrana han sido muy claros con el internacional con Francia y éste, si no se marcha, se quedará en las gradas.
En cualquier caso, Adama llega para dinamizar la delantera y ofrecer velocidad, desborde y verticalidad en el Barça. Llega en calidad de préstamo desde el Wolverhampton hasta el final de temporada y el club azulgrana ha pactado una opción de compra no obligatoria de unos 30 millones de euros más bonus.