El FC Barcelona sigue adelante tras una semana de locos, e intenta centrarse en la conquista de LaLiga y la Champions League. Los catalanes sufrieron eliminaciones dolorosas en la Supercopa de España y la Copa del Rey, así que ahora están obligados a alejar las dudas, dar un paso adelante y acelerar hacia los dos grandes objetivos de la temporada. Además, toca esforzarse para aislarse de un entorno muy revuelto.
Una víctima reciente de los rumores malintencionados fue Riqui Puig, de quien se dijo que estaba 'castigado' por Quique Setién cuando se quedó fuera de la convocatoria dos partidos seguidos. El de Matadepera fue baja por enfermedad en el enfrentamiento liguero ante el Valencia, y poco después, el preparador cántabro tampoco le incluyó en la lista para el compromiso copero ante el Leganés en octavos de final.
En Madrid se apresuraron a buscar culpables para esta ausencia, y se lanzó una acusación peligrosa. Si unos días más tarde, varios medios inventaban una pelea entre dos 'pesos pesados' de la plantilla sin dar detalles, ni nombres, ni ninguna referencia veraz, al canterano también le tocó recibir. Presuntamente, un caño a Leo Messi en un rondo había provocado el enfado del argentino y un toque de atención del míster.
Esta justificación no podía ser más absurda, y el entrenador se encargó de espantar especulaciones con sus últimas decisiones. Si el catalán tuvo unos días de descanso fue unicamente por motivos deportivos, y la preparación fue la clave para que el técnico apostara por otras perlas. Como el centrocampista se había perdido algunos entrenamientos, simplemente esperó a que volviera a coger ritmo antes de volver a llamarle.
Setién sigue abriendo la puerta a las promesas del Barça
Tras este inesperado bajón, Riqui Puig volvió a tener algunos minutos contra el Levante, y también entre en la lista contra el Real Betis. Más allá de asesorarle, observarle y ayudarle en las sesiones en la Ciudad Deportiva, Setién está convencido de que será una pieza importante en lo que resta de temporada, y por eso le mantiene en sus planes pese a que la sala de máquinas es una de las líneas mejor cubiertas del vestuario.
En la última rueda de prensa, el técnico recalcó que tanto él como el resto de sus compañeros tienen abiertas de par en par las puertas del primer equipo, algo que también se pudo comprobar con Álex Collado. El de Sabadell, que cubrió a Riqui contra los 'che' y los 'pepineros', entró porque el de Santander consideró que podía aportar más, ya que ademas de su presencia en el centro del campo, puede jugar como extremo.