El rompecabezas de Lionel Messi en el FC Barcelona

Hasta la fecha, Lionel Messi ha disputado seis encuentros (cuatro con el Barça y dos con Argentina) y registra dos goles, ambos desde el punto penalti y uno con cada equipo. Desde que anunció que quería abandonar el Barça, su rendimiento no ha sido el mismo y ha dejado más dudas que aciertos, con un rompecabezas que aún no logra descifrar el Barcelona, ni el entrenador.

Con el comienzo de campaña tras la polémica del verano, en la que Messi casi abandona el Camp Nou, todos los focos han estado sobre el delantero argentino, que aún no termina de despegar bajo las órdenes de Ronald Koeman. En el partido más reciente, la derrota 1-0 ante el Getafe, el capitán culé apenas apareció. Registró 30 pases buenos en 90 minutos. En comparación, Pedri, que jugó media hora menos, completó 29.

La primera pieza que no encaja en el rompecabezas de Messi es su posición. Koeman ha devuelto al argentino el papel de falso nueve, con el que anotó 73 goles para el Barça en la temporada 2011-2012, pero no le ha funcionado. Ha comenzado en la banda derecha y después se ha movido al centro del campo, pero tampoco ha rendido allí.

Frente al Sevilla y Getafe, Messi se mantuvo activo durante la primera parte. Aunque fue impreciso de cara al arco, generó ocasiones y aportó en gran medida al juego ofensivo del Barça. Sin embargo, en la segunda parte, desapareció cuando el equipo más lo necesitaba. Frente al Sevilla, apretó en los últimos minutos y estuvo a punto de anotar, pero se quedó sin gasolina. Contra el Getafe, fue aún más difícil que se sintiera cómodo, sobre todo después de la falta de Nyom.

No quedan dudas de que el nivel del Barcelona mejoró con la llegada al banquillo del técnico holandés, principalmente en la zaga defensiva, pero en los últimos dos partidos, han demostrado que el camino es largo y hay muchas cosas que mejorar, como la eficacia del ataque, en la que Messi es el protagonista.

Además de ubicar a Antoine Griezmann, que tampoco acaba de despegar, el técnico holandés debe seguir trabajando en el posicionamiento de Messi. Aunque es cierto que debe dar paso a los jugadores más jóvenes, como Ansu Fati o Pedri, continúa siendo el mejor jugador del equipo y, más importante aún, el punto de inflexión del Barça.

Al final de la temporada pasada, el cuadro blaugrana se caracterizó por depender de lo que hacía o no Messi. Cada vez que el argentino cambiaba de ritmo, el equipo también lo hacía. Cuando buscaba balones en el centro del campo, el Barça tenía sus mejores oportunidades de cara al arco pero, si Messi no se encontraba cómodo, su equipo tampoco. Y es algo que, por lo menos hasta ahora, se repite.

En la última media hora de partido, es cuando el Barcelona más necesita a Messi. Aunque Koeman intenta refrescar al equipo con el ingreso de nuevos jugadores, gran parte del ataque sigue siendo responsabilidad del delantero argentino y no ha sido determinante como se espera.

Messi ha jugado todos los minutos

El agotamiento puede ser uno de los factores que ayude a descifrar el rompecabezas en el que se ha convertido Messi, quien ha disputado todos los minutos en esta temporada. Koeman apuntó que si no había problemas físicos, Messi iba a ser titular en los encuentros de esta semana, en la Champions League y la visita del Real Madrid al Camp Nou para El Clásico.

Pero el cansancio puede estar pasándole factura a Leo Messi y, en algún punto, el holandés necesitará rotar en su alineación. Lo positivo, es que el argentino es muy efectivo desde el banquillo. Ha marcado 24 goles saliendo como suplente. Sólo le superan Salinas, con 28 tantos, y De Paula, con 27, demostrando que es un jugador que puede resolver un partido en la última media hora de partido.