El centrocampista uruguayo de 21 años, Ronald Araújo, debutó como goleador en el primer equipo del Barcelona durante el último partido contra el Valencia. En el compromiso, el joven sorprendió a los rivales de los catalanes con un remate de media tijera en el centro del área, aunque el que hiciera una acción así durante el partido tiene una explicación.
Sucede que Araújo fue delantero centro hasta los 17 años en el club uruguayo Rentistas, donde se formó como jugador y debutó como profesional. Fue allí cuando vivió un cambio trascendental en su carrera. Desde siempre había jugado de goleador, hasta que su entrenador, viendo sus condiciones físicas y su capacidad para entender el juego, le situó de central y se convirtió en defensa, un giro radical que le marcó hasta hoy.
Una historia similar fue la de Carles Puyol, quien era delantero en La Pobla de Segur, pero que en La Masia ya comenzó a retrasar la posición, jugando de centrocampista y de defensa en el Barça B hasta que Van Gaal apostó por él como lateral. Esto debido a que Puyol no es especialista en la salida del balón, aunque progresó especialmente en este aspecto en el Barça B.
Y en el club azulgrana, siempre salvando las distancias, ya hay ejecutivos, técnicos y compañeros que comparan al joven central uruguayo con Puyol por sus capacidades defensivas, su dominio del juego aéreo, su agresividad y profesionalidad. Araújo se adaptó rápidamente a la nueva demarcación, pero sin dejar de mantener su olfato de cara a portería. Solo en la temporada pasada en el Barça B, donde ya era capitán, logró tres goles y tres asistencias en los 20 partidos donde estuvo presente, además en su primer año en el filial, la temporada 2018/19, también sumó tres goles en 22 encuentros.
En su debut con el Rentistas, teniendo solo 17 años y jugando ya de defensa aportó 6 goles en 14 encuentros en la Segunda División. Incluso llegó a anotar un 'hat-trick' en uno de los encuentros que disputó, pero a pesar de tener la posición de central Araújo mantiene el alma de delantero. De hecho, en la temporada pasada sus compañeros y miembros del cuerpo técnico debían calmarlo. Contaban que a veces había que frenar sus excursiones al área rival, especialmente cuando el equipo necesitaba empatar o ganar.
Actualmente aún mantiene su personalidad, aguanta mucho más en su posición y a día de hoy sus aventuras en el área rival no son tan habituales. La prioridad es defender y, para marcar goles, están otros jugadores. Aunque, especialmente en acciones a balón parado, demostró tener buen olfato tal y como se vio en el último duelo de los culés contra el Valencia, partido en el que el gol llegó en la jugada posterior a un córner.
Pedri robó en campo propio y Araújo aún estaba en el área. Griezmann se la puso y el uruguayo remató de manera espectacular para estrenarse como culé. Si tiene continuidad se la está ganando con sus acciones en el campo, y de seguir así, ese no será el último tanto de Araujo con el Barça.
Sin cometer faltas
De sus estadísticas ante el Valencia, destaca el hecho de que el joven uruguayo no hiciera ninguna falta pese a su comprometida labor defensiva. Es más, logró recuperar seis balones y completó tres anticipaciones sin cometer ninguna infracción. Lleva once partidos de LaLiga Santander, seis en la pasada temporada y cinco en la actual tras estar un mes lesionado. En Champions League jugó tres.