El secreto de un ex del Milán: "Estuve en casa de Rakitic para ficharle"

Durante la breve etapa en la que Yonghong Li fue dueño del Milán, Massimiliano Mirabelli fue el director deportivo que se encargó de comandar la nave milanista. El italiano intentó hacer su trabajo lo mejor que pudo y en los meses que estuvo en el puesto llegó a intentar fichar a una estrella del FC Barcelona​. En 2017, Ivan Rakitic tenía que renovar su contrato con el conjunto barcelonista y Mirabelli se quiso meter en medio.

El de Rende contó en una entrevista en el portal web 'Calciomercato.com' que cogió un avión a la Ciudad Condal para intentar convencer al centrocampista balcánico de que se fuese al equipo lombardo. "Desvelaré algo que nunca le había dicho antes a nadie. Cuando trabajaba para le Milan, fui a Barcelona para intentar fichar a Ivan Rakitic. El croata estaba negociando la renovación con el Barça, y esperaba que iba a evaluar otras posibilidades para su futuro deportivo", comenzó diciendo el ex secretario técnico de los milanistas.

Mirabelli reconoció que llegó a estar en el domicilio de Rakitic, aunque al final el propio blaugrana les informó de que había decidido renovar con el Barça. "Llegamos a su casa y desde el garaje tomamos un ascensor que nos llevó a su domicilio. Estaba entusiasmado, me dijo que si no hubiera renovado con Barcelona, habría considerado seriamente nuestra propuesta", aseguró.

El ex director deportivo del Milán alabó al croata y admitió que esa conversación con el croata le dejó huella. "Ese diálogo me marcó, me enfrenté a un campeón que no tenía más que el fútbol en su cabeza. Ha dirigido su vida diaria a su carrera deportiva, desde la comida hasta el descanso, desde el tiempo libre hasta el entrenamiento. Finalmente renovó con el Barcelona, pero tuve el placer de conocer a un gran deportista", explicó.

El extraño último año de Rakitic en el Barça

Tal y como ya se sabe y como él cuenta en sus declaraciones, Rakitic amplió su contrato con el Barcelona en la primavera de 2017. El ex del Sevilla firmó una extensión hasta 2021 que le gustaría haber ampliado a estas alturas, pero en el club tenían otros planes para él. Los azulgrana decidieron el año pasado que no querían volver a renovar al mediocampista e incluso intentaron traspasarle al Paris Saint-Germain en el verano de 2019.

Al final, el de Rheinfelden no se movió del Camp Nou y prefirió quedarse y luchar por un puesto. La temporada ha sido algo extraña para él, ya que sin motivo aparente dejó de contar para Ernesto Valverde en el comienzo de curso, de repente entró poco a poco y acabó como titular justo antes del cese del extremeño. Para Quique Setién es un hombre importante en la rotación, pero no es indiscutible. Por ello y porque si no se marcha ya, se irá gratis en un año, el Barça le traspasará este verano con seguridad. El Milán, de hecho, podría ser uno de sus destinos, ya que han vuelto a mostrar interés en él.