Los señalados de la derrota del FC Barcelona ante el Atlético de Madrid

Está claro que nadie del FC Barcelona tuvo su noche en el Wanda Metropolitano contra el Atlético de Madrid. Sin embargo, hubo algunos jugadores que quedaron especialmente marcados por su mala actuación, en especial aquellos de los que se esperaba que liderasen al equipo por su experiencia y galones pero que naufragaron por completo ante los pupilos de Diego Pablo Simeone.

Los señalados del FC Barcelona

• Marc-André ter Stegen. Empezó bien, a su estilo, con un paradón tras un trallazo de Saúl Ñíguez. Sin embargo, cometió un gravísimo error en la acción del gol de Yannick Carrasco, son una salida a destiempo que el belga aprovechó para marcar el único y definitivo gol del partido. El regalo del alemán acabó siendo clave en la derrota culé.
• Gerard Piqué. Le salió absolutamente todo mal. En el primer tiempo, cometió un error de bulto impropio de un central de su categoría. El segundo error suyo originó el gol de Yannick Carrasco, saliendo en la foto del tanto del Atlético de Madrid. Para colmo, en el segundo tiempo se lesionó la rodilla y dejará huérfana la defensa del FC Barcelona.
• Frenkie de Jong. Que juegue mejor de central que de mediocentro organizador comienza a ser sospechoso. Su primer tiempo fue terrible, sin apenas participación en la construcción del juego pese a que ahora juega donde teóricamente le gusta. Sus mejores minutos fueron en el eje de la defensa cuando Gerard Piqué se lesionó pero, para entonces, ya había desaprovechado una nueva oportunidad de ser la brújula del equipo de Ronald Koeman.
• Miralem Pjanic. Llegó al FC Barcelona porque -dejando de lado los balances- debía aportar un rendimiento inmediato que Arthur Melo no ofrecía, pero ya se le ven las costuras. Como Frenkie de Jong, su determinación en la construcción del juego fue nula, estando indeciso en el pase y sin jerarquía. Es cierto que Sergio Busquets no está bien, pero el mal partido del bosnio demostró que Ronald Koeman prefiere al de Badia por ser el menos malo.
• Leo Messi. Es duro decirlo pero, para esto, mejor que se hubiese marchado. Su inoperancia comienza a no tener excusa, ni siquiera para el mejor jugador de la historia. Se escondió por completo en el primer tiempo y fue una máquina de perder balones en el segundo. No tiene ni la chispa ni el acierto de temporadas anteriores y, tal vez, sea cierto lo que dijo en el aeropuerto: empieza a ser un problema para el equipo.
• Antoine Griezmann. Como de costumbre, falló una ocasión en el primer tiempo y desapareció del partido por completo. A día de hoy, parece un jugador muy mediocre de esos que, si no hubiese costado los 135 millones que costó, estaría peleando con Martin Braithwaite por un sitio en el banquillo. Que las torpes declaraciones de quienes le rodean sea más noticiables que sus acciones en el campo describe lo intrascendente que se ha vuelto para el equipo.