El FC Barcelona sigue trabajando en su planificación deportiva, y no lo va a tener nada fácil en el próximo mercado de fichajes. La crisis del coronavirus ha golpeado con dureza los presupuestos, que han pasado de rondar los 1.100 millones a rebajarse hasta los 800. Esto ha frenado en seco la ansiada y necesaria revolución en la plantilla, que deberá gestionarse a través de la contención de gasto y los intercambios de jugadores.
Josep Maria Bartomeu ha vuelto a admitir en una entrevista que, en estas circunstancias, Lautaro Martínez y Neymar son casi imposibles. Las negociaciones con el Inter de Milán se han aplazado hasta el final de la Champions y la Europa League porque los italianos siguen pidiendo casi 100 millones por el argentino, y tampoco pinta bien el panorama con el brasileño porque el PSG ni siquiera está abierto a trueques. Los dos cracks están decididos a vestir de azulgrana, pero si no hay dinero suficiente, podría no bastar sólo con eso.
Más allá de la reforma que está afectando a otras líneas, es evidente que la delantera culés necesita un impulso. Leo Messi y Luis Suárez siguen tirando del carro, pero la edad no perdona y cada vez acusan más los esfuerzos realizados en los últimos años, en especial, desde que el de Sao Paulo se fugó a la Ligue 1. Para reactivar a un conjunto que está marcado por el juego de posesión y el carácter ofensivo, los responsables barcelonistas deberán jugársela con otras soluciones si no pueden conseguir a sus objetivos prioritarios.
Las soluciones para la delantera del Barça
Fichajes
Para empezar, el Barça tendrá que decidir si esperará a Lautaro y Neymar o si apostará definitivamente por otros futbolistas. En 2021 se espera que la recuperación financiera haya empezado, si es que, de una vez por todas, las autoridades sanitarias consiguen poner control a la pandemia y, entre otras cuestiones, resucitan los ingresos que genera el público que hoy por hoy no puede visitar el Camp Nou. En el próximo verano, si el ex del Santos no ha renovado su contrato, podría estar a tiro, y el de Bahía Blanca podrá ejercer más presión sobre los 'nerazzurri'.
A priori, las bandas están bien cubiertas entre los cracks que hay y los que vienen, pero el caso del nueve es muy delicado. Suárez se esfuerza por cuidarse pero la rodilla no le da tregua, y ya se ha demostrado que su perfil no puede cubrirlo nadie en el vestuario actual. Antoine Griezmann o Martin Braithwaite podrían intentarlo, pero el francés está perdido en sus propios problemas de adaptación y el danés, tras convertirse un año más en otro parche de emergencia, podría ser traspasado o cedido para recuperar la inversión.
Con estos condicionantes sobre la mesa, la opción urgente y 'buena, bonita y barata' podría ser Pierre-Emerick Aubameyang. El de Laval tiene 31 años, pero acaba contrato en 2021 y no está decidido a aceptar la extensión que le propone el Arsenal. Sabe que sus virtudes las podrían explotar los catalanes y que si mantiene su nivel dos o tres años podría ser un ariete puente hasta que Lautaro esté más a tiro. Esta sería una solución en la recámara, pero hay que valorar todas las alternativas tanto para la punta de ataque como para los costados.
Jugadores ya contratados
De momento, el club parece decidido a dar salida al citado Braithwaite y a Philippe Coutinho, pero tampoco habría que descartar otras. Messi, Suárez y Ansu están blindados, Griezmann tampoco parece que vaya a marcharse y las miradas se centran en Ousmane Dembélé, porque si llega una buena oferta podría hacer las maletas -cedido o traspasado-, y si no podría tener una última oportunidad para reivindicarse.
En una campaña larga y de nuevo con un calendario apretado, el reto será gestionar bien los minutos, pero hay soluciones prometedoras. En principio, Messi seguirá liderando al equipo desde la banda derecha, pero también puede aportar soluciones como media punta o falso nueve. Suárez se mantendrá como especialista en punta y Ansu suele partir desde la izquierda. Contar con un Dembélé recuperado sería clave, ya que si está en forma, el de Vernon ha demostrado que puede ser muy útil aportando desborde y generando goles y asistencias. Si Quique Setién no se aleja del 4-3-3, aunque apueste por variantes como la medular en rombo, Griezmann podría ser útil como media punta o segundo delantero.
Para reactivar el desequilibrio, desborde y uno contra uno que el Barça tanto echa de menos, el arma podría ser Francisco Trincao, que a sus 20 años tiene fortaleza mental y potencial suficiente como para empezar a probarse en el primer equipo. La pretemporada determinará si lo más conveniente es una cesión, pero observando su rendimiento en el Sporting de Braga, podría ayudar en cuanto ponga un pie en la Ciudad Condal. Tanto él como sus entrenadores avisan que su posición ideal es la que ocupa Messi, pero él mismo señala que si tiene que moverse, no dudará en hacerlo con tal de beneficiar al colectivo. Pedri, como ya hacía Iniesta, podría actuar como falso extremo, pero su puesto debe estar en la medular.