La temporada 2021-2022 fue una muy complicada para Marc-André Ter Stegen. Al principio de la campaña, el guardameta fue muy cuestionado por propios y extraños, no generaba la confianza de antes y sus actuaciones eran criticadas partido tras partido. Sin embargo, después la llegada de Xavi y la buena racha vivida por el FC Barcelonael alemán recuperó su mejor estado de forma y volvió a ser fundamental para los culés, que parecían haber 'enderezado' su camino. Pese a esto, el bajón del equipo al final de la campaña le 'arrastró' y volvió a dejar dudas bajo los tres palos.

Más allá de haber dejado una serie de atajadas 'claves' en algunos choques de Liga, en líneas generales el teutón dio una sensación de inmensa fragilidad a lo largo del curso. Su imagen quedó lejos de aquel 'muro impasable' que se consagró como uno de los mejores porteros del mundo y su media de paradas lo reflejó, ya que con 2,17 atajadas por partido se ubicó entre los promedios más bajos de todo el campeonato. Además, su número absoluto de intervenciones (76) le dejaron en el puesto número 14 de la competición nacional, dejando en evidencia que el bajón de rendimiento del futbolista.

Sin embargo, el de Mönchengladbach ha sabido darle un 'giro' a su situación en el inicio de esta temporada 2022-2023. El guardameta ha sido clave en el buen andar del equipo del egarense en las primeras 8 jornadas de LaLiga Santander, dejando su valla invicta en siete encuentros, seis de estos de manera consecutiva (Valladolid, Sevilla, Cádiz, Elche, Mallorca y Celta) y habiendo recibido un solo gol (en los pies de Isak en el 1-4 ante la Real Sociedad), lo que le ha consolidado como el 'salvador' del Barça gracias a sus atajadas 'milagrosas'.

Así pues, en el partido ante los dirigidos por Eduardo Coudet el germano volvió a realizar una nueva exhibición. Marc-André enfrentaba a su 'bestia negra', un Celta al que, hasta este domingo, solo le había ganado en cuatro choques de los once en total, con cuatro empates y tres derrotas completando la estadística. Además, Iago Aspas había celebrado 9 goles en su contra, por lo que el teutón presentaba una prueba de 'fuego'. Sin embargo, salió 'airoso' del duelo, con una serie de atajadas fundamentales que le dieron el triunfo a su equipo y aumentan su racha de imbatibilidad a 624 minutos. Un auténtico 'muro'.

A por el récord de un culé

Ahora, Ter Stegen ha puesto la mira en el récord poseído por Claudio Bravo, quien es el guardameta del Barça con mayor número de minutos sin recibir gol en la Liga. En el inicio de la campaña 2014-2015, el chileno estuvo 755 minutos imbatido, hasta que Cristiano Ronaldo rompió las redes de su portería en el Clásico que posteriormente ganaría el Real Madrid por 3-1. Casualmente, el alemán se verá las caras con los merengues en la próxima jornada, buscando mantener su racha ante el poderío ofensivo de la Casa Blanca.