Desde que llegó al FC Barcelona, Arthur Melo demostró ser un futbolista habitualmente indisciplinado. Pese a que ilusionó al barcelonismo cuando llegó con algunos buenos partidos como el 2-4 contra el Tottenham Hotspur en Champions League o el 5-1 contra el Real Madrid en LaLiga Santander, siempre demostró que fuera del campo es alguien despreocupado que a veces no actúa como un profesional.
Empezó viajando a París a la fiesta nocturna de cumpleaños de Neymar el día antes del entrenamiento previo a un Clásico contra el Real Madrid (en el que, por cierto, se lesionó). Pese a que se disculpó, en diciembre de 2019 se fue a hacer snowboard estando de baja por lesión, infringiendo el código interno. Esta semana, con su equipo jugándose LaLiga Santander, protagonizó la triste imagen del partido con sus bostezos, casi quedándose dormido.
Por si todo ello fuera poco, se borró de jugar el último partido de LaLiga este domingo contra el Deportivo Alavés alegando una supuesta molestia en el tobillo de la que no hay ni informe médico. El brasileño no ha jugado ni un solo minuto desde que fichó por la Juventus, al contrario de un Miralem Pjanic que, pese a que firmó por el FC Barcelona, no ha bajado su nivel y sigue siendo indiscutible para Maurizio Sarri en este tramo final de temporada.
Miralem Pjanic ofrece más que Arthur Melo
En líneas generales, el barcelonismo se está mostrando muy crítico con la operación que el FC Barcelona derró con la Juventus de Turín. El argumento principal para ello es que Arthur Melo tiene 23 años (cumple 24 en agosto) y tiene mucho margen de mejora por delante, mientras que Miralem Pjanic cumplió 30 en abril y tendrá menos tiempo por delante para explotar su talento.
Pero debemos verlo todo con perspectiva. Arthur Melo lleva dos años en el Barça y no ha tenido continuidad, ya sea por las lesiones o porque su rendimiento no ha destacado. Ni con Ernesto Valverde ni con Quique Setién ha conseguido ser titular habitual, en parte porque nunca ha conseguido adaptarse al esquema culé. Es demasiado débil defensivamente jugando en la posición de Sergio Busquets y demasiado conservador en el pase para hacerlo más adelantado, como interior.
En cambio, el FC Barcelona incorporará a un todoterreno como Miralem Pjanic: fiable en la circulación de balón, brillante en la asociación, inteligente para recuperar balones, formidable tirador lejano y un as a balón parado. Puede jugar como mediocentro o de interior sin problemas, y siempre ha sido titular indiscutible en todos sus equipos. Tiene 30 años, sí, pero todavía le quedan varios a un gran nivel, mientras que Arthur Melo todavía tiene que demostrar si puede ser importante en un equipo al más alto nivel.