Golpe a la Liga: Neymar se pierde el Clásico Madrid-Barça

¿Alguien que haya visto un sólo partido de Neymar en LaLiga podría sancionarle por lo que lo ha sancionado el Comité de Competición? ¿Realmente hay que mostrarse tan riguroso y castigar a un atacante con una sanción propia de alguien que ha ido con mala fe a lesionar? Estas preguntas y muchas más están ahora mismo en la cabeza del barcelonismo, que atiendo atónito a la pérdida de uno de los mejores del mundo en el Clásico Madrid-Barça.

Su baja será de suma importancia y deja muy tocada a la propia competición doméstica. La deja tocada porque el encuentro es de carácter mundial, y medio mundo se preguntará la razón por la que uno de los que aspiran al próximo Balón de Oro no lo juegan. ¿Y la respuesta? No la tendrán, pues esa doble amonestación y haber, supuestamente, aplaudido al linier tras su expulsión no son razón de peso para ello.

Neymar, el jugador con más faltas recibidas en la historia de LaLiga

Es cuanto menos curioso que siendo Neymar el jugador que, en porcentaje, más faltas ha recibido en la historia de LaLiga, acabe sancionado y perdiéndose el encuentro más importante de la competición. Hace tiempo que se viene pidiendo una mayor protección para él y los colegiados han hecho todo lo contrario. Han penalizado tanto a "Ney" como a la "MSN" por reacciones a las constantes faltas que reciben y no son sancionadas como deben serlo.

Sin ir más lejos, frente al propio Málaga el pasado sábado el atacante recibió una falta de Juzgado de Guardia cuando no se llevaba disputado ni un minuto. Esa manera que tienen los defensores de LaLiga de marcar su territorio en los partidos del Barça, contando con la total impunidad de los jueces.

La sanción, por tanto, es un verdadero golpe a LaLiga. Una caza de brujas contra el que posiblemente sea el jugador con más talento puro de todo el campeonato. Pero ya saben, en este país el talento siempre se acaba penalizando y el deporte rey no es una excepción. Hay cosas "ocultas", como lo denunció en su momento Piqué, que prevalecen por encima del fútbol. Y eso es lo realmente preocupante y que hace que muchos hayan perdido ya la ilusión.