El mundo del fútbol continúa centrado en hacer frente a la crisis del coronavirus, y prevé que en las próximas semanas habrá certezas. Tras un tiempo que no ha ido más allá del confinamiento y la incertidumbre, la situación empieza lentamente a controlarse y podría dejar espacio a soluciones reales para poner fin al parón. En cuanto el Gobierno dé luz verde al regreso del deporte, todos quieren estar absolutamente preparados.
La Comisión de Seguimiento creada por las autoridades futbolísticas españolas empieza a dibujar cómo será LaLiga cuando se reanude, contando que se valora regresar en el mes de junio. Representantes de la patronal, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), las asociaciones de Jugadores y Jugadoras de Fútbol Sala y los clubes de fútbol femenino y fútbol sala han empezado a sellar acuerdos sobre el protocolo a seguir cuando el balón ruede de nuevo.
El plan de actuación incluye partidos cada 72 horas como mínimo, una condición marcada por la normativa FIFA y que aseguró la RFEF, dispuesta a responder a las advertencias de la AFE. En su nota también se habla de las pausas de hidratación que deberá decretar el árbitro, en principio una en cada tiempo, y aunque LaLiga señala que este punto no se comentó, no se opondría a una medida que genera consenso.
También está cerca de ser un hecho que los encuentros se disputarán a puerta cerrada, como poco, hasta septiembre. Javier Tebas concretó que las jornadas pensadas para la reanudación serían el 29 de mayo, el 6 de junio o el 28 de junio, y pese a que se pueda arrancar con el supuesto más optimista, fuentes de Sanidad ya han aclarado que no se permitirán aglomeraciones hasta, como mínimo, pasado el verano.
En una reunión telemática con cierta tensión, una de las discusiones la provocaron los horarios. Según el diario 'AS', la Federación pretendía reservarse el derecho a veto si las condiciones meteorológicas lo aconsejan, pero LaLiga subrayó que esta es una competencia que le pertenece. En esta disputa deberá mediar el Consejo Superior de Deportes (CSD), que en principio aprobó la autorización actual.
El otro conflicto estaría provocado por el contrato de los jugadores, ya que la AFE se niega a que los compromisos se extiendan más allá del 30 de junio. La RFEF ha advertido que este cambio está sujeto a la reglamentación de la FIFA, que lo ajustó al tratarse de una situación de fuerza mayor y que considera que sí puede intervenir en las relaciones laborales entre clubes y futbolistas, aunque el sindicato apunta lo contrario.
La pretemporada para LaLiga también está diseñada
La próxima reunión telemática de la RFEF dará validez a estos acuerdos, poco después de concretar cómo se retomarán los entrenamientos para la pretemporada que también ha organizado LaLiga. La distribución de los jugadores por grupos y la gestión detallada de las instalaciones de los clubes forman parte de otro plan de actuación para las dos o tres semanas que se dedicarán a coger ritmo antes de reanudar el campeonato.