Una ola de críticas y alabanzas, sorpresa e indignación a partes iguales, se ha desatado tras el cobro del penal señalado en favor del Sevilla por una mano en el área cometida por Militao, en el choque de este domingo entre el cuadro andaluz y el Real Madrid. Dicha acción repercutió en el resultado (2-2), y le impidió a los de Zinedine Zidane conquistar el liderato de LaLiga.
En este asunto, el Atlético de Madrid tiene también algo qué decir. En primera instancia porque el título liguero está en juego y se lo está disputando con su vecino y rival capitalino. Y, sobre todo, porque desde los ‘satélites de comunicación’ madridistas se está intentando comparar un par de acciones distintas, para justificar la falsa sensación de que hubiese una especie de complot contra el Real Madrid desde el punto de vista arbitral.
Es importante aclarar que se han generado múltiples comparaciones entre el penal señalado a Militao por su mano ante el Sevilla que derivó en el 1-2, y la que cometió Felipe Augusto Monteiro en el derbi Atlético-Real Madrid, que no fue penal. En ambas jugadas, el VAR fue clave para la toma de decisiones que sentenció el partido.
Desde la institución colchonero se recuerda que en las dos jugadas el VAR acertó. Según lo que contempla ahora mismo el reglamento, acertó. La norma quizá no sea del agrado de muchos en este momento, la interpretación o espíritu del juego, pero con base al reglamento tal como está estructurado hoy día, la mano de Felipe no era penalti y la de Militao indudablemente sí lo fue.
El reglamento contempla lo siguiente: “Cometerá infracción el jugador que toque el balón de manera voluntaria con la mano o el brazo, incluido el movimiento en dirección al balón con estas partes del cuerpo; marque gol en la portería adversaria directamente con la mano o el brazo —incluso si la acción se produce de forma accidental—, incluido el guardameta; inmediatamente después de que el balón le toque a él o a un compañero de equipo en la mano o el brazo, incluso de manera accidental”.
Sobre la posición del brazo
Quien “marque gol en la portería adversaria (se entiende con la mano); genere una ocasión de gol; toque el balón con la mano o el brazo cuando la mano o el brazo se posicionen de manera antinatural y consigan que el cuerpo ocupe más espacio; la mano o el brazo se sitúen por encima de la altura del hombro o más allá de este, a menos que se juegue primero el balón de manera voluntaria con otra parte del cuerpo, y luego toque este en la mano o el brazo”.
Es decir, que en este caso no cabe comparación alguna entre las jugadas de Felipe y Militao. Pues en el caso del futbolista del Atlético, su brazo se encontraba en posición natural y hacia abajo. En el del madridista, el brazo lo tenía extendido, por encima del hombro, hacia arriba. Por tanto, el VAR acertó en las sentencias de ambas jugadas.
“Es alucinante, no tienen nada que ver las jugadas. Encima estamos en lo de siempre, se quejan de dos aciertos del VAR. ¿Cómo es posible? Critican hasta los aciertos. ¿Cómo es que el VAR decide LaLiga? Ni de lejos, si toma dos decisiones y acierta...”, se lamentan en el club colchonero respecto a esta campaña de señalamientos hacia los árbitros que se ha desarrollado tras el partido ante el Sevilla.
Miedo a las repercusiones
En la institución rojiblanca se teme que afecte a los próximos arbitrajes, bien sea del Real Madrid o del propio Atlético, que tiene mucho en juego. Es importante recordar que el cuadro colchonero, de manera institucional ya se había quejado de la campaña madridista tras el derbi del Metropolitano, en la que se intentaba meter presión.