Bono se vistió de cómplice para el Real Madrid

La jornada 12 de LaLiga Santander prometía ser interesante desde la previa, ya que contaba con un plato fuerte entre los partidos que estaban pautados para el fin de semana, como lo era el encuentro entre el Sevilla y el Real Madrid. Dos equipos que se encuentran en la parte alta de la tabla y que, incluso, eran rivales directos en la misma, chocarían en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán.

El encuentro contó con varias oportunidades de ambos equipos, las cuales no fueron concretadas de forma correcta, o bien, fueron detenidas por los respectivos porteros de los dos bandos. En el caso del Sevilla, el marroquí Bono tuvo una destacada primera mitad, gracias a la buena salvada que hizo tras un disparo rastrero de Karim Benzema, que por poco entra en su arco. 

Sin embargo, para la segunda parte del encuentro y con el marcador aún con igualdad en cero, Bono pasó rápidamente de ser el héroe sevillista a convertirse en el responsable de que el Madrid consiguiera los tres puntos en esta jornada, luego de cometer un error en una jugada que parecía totalmente controlable. Tras un centro raso de Mendy, el portero no pudo controlar el balón y el mismo, tras impactar entre sus brazos, se coló en su portería, dejando así el 0-1 a favor de los de Zidane en el resultado transitorio y final del encuentro.

Error y pena de Bono

El error de Bono, más allá de lo enredado que fue, no solo le costó algunos puntos al Sevilla ni solo fue la causa de que el Madrid consiguiera algo de oxígeno entre la crisis que vive actualmente. Esta situación llevó al cuadro andaluz a perder el reconocimiento de ser el tercer equipo con menos goles recibidos en la tabla de LaLiga Santander. 

Antes del enfrentamiento ante el Real Madrid, los dirigidos por Julen Lopetegui contaban únicamente con ocho goles en contra, siendo superados en este factor únicamente por la Real Sociedad y el Atlético de Madrid, equipos que cuentan con cinco y dos tantos recibidos, respectivamente, en el torneo. Ahora, el Sevilla se une al Barcelona y al Eibar, ya que los tres conjuntos tienen un total de nueve goles en contra en los registros ligueros.