El Comité de Competición no perdonará el gesto solidario de Raphinha

Raphinha dejó un gran detalle tras anotar el 2-0 definitivo para el FC Barcelona desde el punto de penalti. El brasileño se quitó su camiseta para exhibir un mensaje solidario para el estado brasileño de Río Grande do Soul debido a las graves inundaciones que están sufriendo. Esta reacción le supuso una tarjeta amarilla por parte del colegiado Cuadra Fernández, algo que se especifica en el reglamento de la FIFA.

"En el minuto 90 el jugador (11) Raphael Dias Belloli fue amonestado por el siguiente motivo: Por quitarse la camiseta, con ocasión de la celebración de un gol. Al quitársela portaba otra camiseta interior con el mensaje "Pray for RS" sobre una bandera del estado brasileño de Rio Grande do Sul", reflejó en el acta. Sin embargo, por el contexto de la situación se esperaba que el brasileño pudiese ser perdonado, pero finalmente no ha sido así.

El Comité hará cumplir el reglamento

La reacción de Raphinha supondrá que Competición mantenga la tarjeta amarilla, además de multar al brasileño y al propio club según el artículo 96 del Código Disciplinario relativo a las celebraciones. Allí, el Comité explica que “el/la futbolista que, con ocasión de haber conseguido un gol o por alguna otra causa derivada de las vicisitudes del juego, alce su camiseta y exhiba cualquiera clase de publicidad, lema, leyenda, siglas, anagramas o dibujos, sean los que fueren sus contenidos o la finalidad de la acción, será sancionado, como autor/a de una falta grave, con multa en cuantía de hasta 3.000 euros y amonestación, y así lo hiciera constar el árbitro/a en el acta arbitral en el apartado de amonestaciones o de incidencias”.

Raphinha mostró su lado más humano y 'carioca' 

El delantero culé, que afortunadamente no vio su quinta amarilla por su celebración, únicamente quiso mostrar su apoyo a la región que vio crecer al futbolista brasileño. Actualmente el estado sufre una de las mayores catástrofes medioambientales de la historia del país. Ahora mismo las cifras son de 147 muertes, 395.000 desplazados, 1,9 millones de afectados y 441 ciudades bajo el agua, por lo que el 'carioca' quiso tener un detalle con los suyos, aunque igualmente le ha costado una tarjeta amarilla y una multa de unos 600 euros.