El futuro de Vitor Roque, un dolor de cabeza para el FC Barcelona

Vitor Roque afrontará este domingo su primer partido decisivo con el Real Betis. El delantero cedido por el FC Barcelona podría quedarse en el banquillo durante el derbi sevillano, algo que puede ser determinante de cara a su futuro en el conjunto 'verdiblanco'. Aunque 'Tigrinho' generó muchas expectativas a la afición y al cuerpo técnico, su falta de puntería y carácter comienzan a generar serias dudas sobre su futuro en la institución.

Y es que, en 6 partidos (2 como titular), el de Timóteo apenas ha podido marcarle al Leganés. Son 303 minutos en total, con varias actuaciones flojísimas (sobre todo ante Getafe y Mallorca) y múltiples oportunidades claras desperdiciadas. El técnico Manuel Pellegrini aún confía en que, cuando Vitor logre ganar la confianza suficiente en el área, los goles comenzarán a llegar, pero este proceso puede tardar más de lo que el conjunto bético está en condiciones de esperar.

"Es joven, pero llevaba muchos meses en Barcelona trabajando sin jugar y poco a poco se va poniendo a punto futbolísticamente. Es más una cuestión de precisión que de físico", explicó el entrenador chileno sobre el brasileño tras el partido ante el Getafe, donde jugó 86 minutos. El Betis se mantiene en la mitad de la clasificación, pero apenas ha anotado 8 goles en igual número de jornadas de Liga. La falta de gol es el principal problema del equipo y, si Roque no logra hacer el trabajo, tiene muy complicado quedarse.

El Barça comienza a preocuparse por Vitor Roque

En ese sentido, el Barça comienza a temer por el retorno de 'Tigrinho' mucho antes de lo previsto. Los culés negociaron su salida a préstamo por un año más otro opcional, ambas con la posibilidad de traspaso por 25 millones de euros. El Barça, en caso de cerrar la venta, se reserva el 20 % de los derechos deportivos del ex Athlético Paranaense, pero la negociación puede quedar en nada en el verano de 2025 si, finalmente, Vitor no logra completar una buena temporada. El curso apenas comienza, pero las sensaciones, por ahora, no son las mejores de cara al futuro.