¡Justicia! Vinicius Jr se fue a la calle por una agresión y se encaró con la grada

Ánimos caldeados en Mestalla después de un partido en el que pasó de todo y que acaba con la cuarta derrota seguida del Real Madrid fuera de casa. El partido duró más de 125 minuros y se vivió 'de todo' en una tarde en la que Vinícius Jr fue uno de los grandes protagonistas, pero no por su rendimiento dentro del césped. Estuvo en la jugada más polémica del encuentro, con dos balones dentro del campo, fue insultado, devolvió insultos, estuvo en una tangana, agredió, le agredieron... y acabó con su primera tarjeta roja en el primer equipo madridista.

El jugador de 22 años se mantiene en los focos y en Mestalla ha vivido uno de los partidos más calientes de la temporada en el que le pasó de todo. Comenzó muy 'vigilado' por el Valencia y sin oportunidades para salir en carrera e internarse en el área rival, pero en la segunda parte fue cuando comenzó la polémica: Se iba en carrera y ganaba la marca a su adversario, pero cuando iba a llegar a línea de fondo, un segundo balón se coló en el área y Comert lo disparó justo donde estaba el que atacaba Vinicius. Desde allí, no volvió la tranquilidad. 

De encararse a la grada a ser expulsado

En medio de las explicaciones por los dos balones, Vinícius se dirigió a las gradas porque escuchó, presuntamente, un insulto racista por parte de un aficionado que él mismo identificó. Fue a reclamárselo y notificar al árbitro lo que había pasado, comenzando una batalla que duró alrededor de cinco minutos y que acabó, únicamente, con la megafonía pidiendo que cesaran los insultos. 

El partido se terminó reanudando, pero no volvió a ser el mismo. Cada vez que el futbolista tocaba el balón, era recriminado desde las gradas. Hasta el punto de que, cuando comenzaban a disputarse los diez minutos de extratiempo, comenzó una tangana en la que los dos equipos se enfrentaron entre sí. Vinicius terminó agrediendo a Hugo Duro, después de que el valencianista también le agrediera con dureza. Vio primero la amarilla, pero tras la rectificación acabó siendo mandado directamente a la calle. En el camino, hizo el gesto de "¡a segunda!" a los aficionados en Mestalla.