Tres meses después del parón obligado de LaLiga Santander, volvió la competición doméstica. Y lo hizo con uno de los grandes partidos que puede dar la Primera División española: en Sevilla-Real Betis. Aunque, naturalmente, las secuelas de la pandemia del coronavirus estuvieron muy presentes en el derbi andaluz: mascarillas, protocolo y las gradas vacías del Ramón Sánchez Pizjuán.
Tocaba disfrutar con el regreso del fútbol en España, pero tocaba también tantear cómo será la 'nueva normalidad' que marcará el mundo del deporte durante los próximos meses. Y en especial, el del fútbol, que estrenó la nueva normativa en la que los partidos tendrán cinco cambios, además de un silencio sepulcral en el estadio que invitaba a escuchar el sonido de ambiente de los jugadores en el campo, con gritos y el ruido de la pelota al impactar con los futbolistas.
El derbi más distinto de la historia por la falta del ambiente se lo acabó llevando el Sevilla, que demostró haber vuelto del parón con una mentalidad fresca y con ganas de consolidarse en los puestos que dan acceso a la Champions League. El cuadro de Julen Lopetegui fue claro dominador del encuentro y se acabó llevando los tres puntos demostrando más solidez e ideas que el Betis.
Pese a que fueron los verdiblancos los que intentaron tener un inicio de dominio, pronto el Sevilla se posicionó sobre el tapete para tomar las riendas del partido. Lucas Ocampos, que en el primer tiempo ya avisó con un tiro a la escuadra en el primer tiempo, se encargó de marcar el primer gol post-parón con un lanzamiento de penalti que Joel Robles no pudo detener.
Era el minuto 56 y los sevillistas solamente tardarían seis más en sentenciar el duelo. Fue por mediación de una jugada de estrategia, que taconeó el propio Ocampos para que Fernando acabase mandando el balón al fondo de las maññas con un remate a quemarropa. El marcador ya no se movería más para terminar en ese 2-0 que había plasmado la superioridad del Sevilla.
Emoción en la vuelta al fútbol
El derbi andaluz solamente fue un pequeño avance de lo que nos espera en estas 11 frenéticas jornadas de LaLiga Santander. Con el título en juego, el FC Barcelona y el Real Madrid pelearán por el campeonato, mientras que la pelea por la Champions League, por la Europa League y por la permanencia estarán también al rojo vivo. El fútbol ha vuelto. Diferente, pero está de regreso, al fin y al cabo.