Messi y Suárez no faltan en Año Nuevo desde la guerra de Anoeta

Justo cinco años atrás, el 4 de enero de 2015, ardió un incendio de grandes dimensiones en el vestuario del FC Barcelona. Fue en Anoeta, en el primer partido del año y con un rival peligroso como la Real Sociedad en frente. El entonces entrenador, Luis Enrique, tomó una decisión controvertida: dejar a Leo Messi, Neymar, Gerard Piqué y Dani Alves en el banquillo.

Había que tener en cuenta que los jugadores sudamericanos habían podido alargar sus vacaciones navideñas como cada año, por lo que el asturiano optó por dejar a la mayoría de ellos en el banquillo. Y estalló la guerra civil dentro del equipo. Naturalmente, la Real Sociedad derrotó a los azulgranas (1-0), con un Messi muy enfadado, saliendo desde el banquillo en una actitud totalmente pasiva.

El astro argentino no se presentó al entrenamiento de puertas abiertas del día después y se inició una guerra que casi acaba con la cabeza de Luis Enrique. Al final, las aguas se calmaron y aquel equipo que parecía totalmente roto en invierno fue capaz de llevarse el triplete, pudiendo ver imágenes como la ya mítica de Messi y el técnico asturiano abrazados y reconciliados.

Desde entonces, Leo Messi y Luis Suárez siempre han sido titulares en LaLiga el partido justo después de Año Nuevo. Tanto Luis Enrique en sus temporadas posteriores como Ernesto Valverde cuando tomó su relevo, respetaron las vacaciones más largas de los jugadores sudamericanos sin que ello influyese en su titularidad en el primer encuentro liguero de cada año.

El único paréntesis de esta regla llegó en enero de 2018, en un partido de Copa del Rey ante el Celta en Vigo en el que Ernesto Valverde rotó a muchos futbolistas y en el que Leo Messi y Luis Suárez no fueron convocados. Ese encuentro terminó con empate a un gol y fue el único desde 2015 que no tuvo al argentino y al uruguayo sobre el césped.

Titulares frente al Espanyol

A día de hoy, la presencia de ambos es totalmente indiscutible en el equipo, por lo que sería muy raro que se quedasen fuera del equipo contra el RCD Espanyol en el primer partido de 2020. El equipo blanquiazul llega al partido con ilusión, con nuevo entrenador y con una necesidad extrema de obtener puntos para iniciar su escalada hacia la salvación. Messi y Suárez serán fundamentales.