A pesar de que el Barça necesitaba ganar a Osasuna y esperar a que el Real Madrid 'pinchara' en su partido contra el Villarreal, las cosas no salieron según lo previsto al descanso de ambos partidos. Un gol de José Arnáiz, que hace unos años vestía la elástica azulgrana y marcó algunos goles con el primer equipo, trastocó los planes de Quique Setién a partir del minuto 15.
Y el gol de Karim Benzema en Valdebebas, unos minutos después, fue un nuevo jarro de agua fría que no tuvo solución transcurridos los primeros 45 minutos de juego. El conjunto culé se marchó por debajo en el marcador de forma sorprendente en el Camp Nou, donde hasta la fecha acumulaba 42 partidos consecutivos invicto (36 triunfos y 6 derrotas).
El gol de Arnáiz llegó tras una de las varias incursiones por la banda izquierda de Pervis Estupiñán, que hizo mucho daño a Nélson Semedo y al resto de la defensa azulgrana. Un pase al centro del área del jugador sudamericano, después de llegar hasta la línea de fondo, permitió a Arnáiz rematar muy cerca de la portería al palo corto, batiendo así a Ter Stegen y dando la sorpresa en Betway y el resto de casas de apuestas.
El delantero rojillo no dudó en celebrar el gol a pesar de su pasado barcelonista, y tras la diana llegaron algunas ocasiones más de Osasuna, principalmente un disparo de Moncayola desde fuera del área que estuvo a punto de poner el segundo en el marcador. El FC Barcelona no dispuso de oportunidades claras a excepción de dos disparos de falta de Leo Messi: uno se fue al travesaño y, el otro, ligeramente desviado por encima de la portería.
Un Barça con la mente en otra parte
Se llegó al descanso con un FC Barcelona irregular, gris y visiblemente cansado a pesar de las rotaciones introducidas por Quique Setién. 0-1 atípico al medio tiempo, y que sin duda rompía todas las apuestas deportivas realizadas hasta el momento. No pintaba bien la cosa para el Barça, así que el técnico cántabro mandó a calentar a varios de sus pesos pesados en el banquillo.
Se sabía que el Real Madrid podía conquistar matemáticamente LaLiga este jueves, pero no que el FC Barcelona saliera tan blando ante Osasuna en la primera mitad, con el título todavía en juego hasta el término de los noventa minutos. Mala imagen de un Barça que, según parece, ya estaba pensando en la Champions League y en el partido ante el Nápoles.