Desde hace algún tiempo los derbis entre Real Madrid y Atlético de Madrid han tomado 'color' de Clásico por el nivel de competitividad entre ambos equipos. Hay una 'guerra' interna entre los dos y, en el de esta jornada 23 de LaLiga, no ha sido la excepción. El Santiago Bernabéu ha sido testigo de uno de los enfrentamientos más calientes y disputados en lo que va de temporada, que se ha saldado empate gracias al gol de Marcos Llorente en el descuento.

Los de Carlo Ancelotti llegaban 'condicionados' por la baja de Antonio Rüdiger y la ausencia de última hora de Vini Jr, quien se tuvo que retirar del campo durante el entrenamiento por un problema en las cervicales. Las alarmas estaban encendidas en Chamartín, porque Dani Carvajal 'repetía' -como aquél día contra el Chelsea- de central y Brahim Díaz entraba en el XI a última hora sin apenas calentar al máximo nivel en la previa. 

La solución del Madrid fue Brahim Díaz

Ante los previsibles problemas que podían encontrar atrás, el Madrid empujó para tener la posesión y que el partido se jugara, en los minutos iniciales, en el campo rojiblanco. La calma de Kroos, el ritmo de Jude Bellingham, la velocidad de Fede Valverde y capacidad para 'multiplicarse' de Eduardo Camavinga fueron clave para que, desde muy pronto, los merengues fuesen capaces de vivir en el área rival con acercamientos 'tímidos' a la portería de Jan Oblak. El '5' lo intentó con una internada que despejó Witsel, Rodrygo y Camavinga con remates lejanos... pero el Atleti supo cómo mantenerse firme. 

Cuando los del 'Cholo' Simeone se 'quitaron' la presión de encima, pudieron probar a Lunin: Morata envió un disparo cruzado, potente, que repelió el guardameta y después fue Griezmann quien obligó al ucraniano a sacar el puño para evitar el gol. La 'igualdad' parecía establecerse, pero el Madrid fue más listo: En un despiste de la zaga rojiblanca, que no estuvo contundente, Brahim Díaz cazó un rebote para mandar el balón a lo más profundo de la red. Se revisó un posible fuera de juego de Lucas Vázquez en el arranque de la jugada, pero todo estaba habilitado. 

El Atlético no supo 'superar' el shock

Brahim pasó de ser 'suplente' a anotar un gol en menos de 25 minutos. Dio la calma que necesitaban los madridistas pese a que los visitantes querían aprovechar las jugadas aéreas para 'aprovecharse' de la baja estatura de los defensores madridistas. Lunin se vistió de héroe para blocar el testarazo de Witsel y después fue Savic quien intentó aprovechar un córner cerrado de Griezmann para mandar un cabezazo que se marchó 'lamiendo' el palo largo.  

El Madrid se vio 'forzado' a dar un paso adelante, nuevamente, y aunque no pudieron aumentar su ventaja en el electrónico, dejaron varias ocasiones claras 'valiéndose' de la velocidad de sus jugadores y los contragolpes. Rodrygo tuvo la suya con un remate cruzado y Brahim 'repitió' con una nueva internada en el área, pero su disparo se estrelló en el lateral de la red. Valverde 'cerró' el primer tiempo con una contra veloz que acabó finalizando él mismo con un disparo alto.

Quejas y polémicas en la reanudación en el Bernabéu

La reanudación, tras un córner 'regalado' por Mendy, comenzó con una 'intentona' de polémica por un gol anulado a Savic. En la jugada, Saúl está en fuera de juego posicional y evita la visión y posterior salida de Lunin al momento del remate del futbolista montenegrino. Después de revisión del VAR, la diana no subió al marcador pese a las quejas del Atleti. La polémica, sin embargo, no hizo nada más que empezar en el Santiago Bernabéu.

En menos de diez minutos, los madridistas reclamaron dos penaltis. Primero por un derribo de Lucas Vázquez ante Saúl, en el que no vio nada punible Sánchez Martínez, al igual que en una caída de Jude Bellingham tras un derribo de Savic. La indignación fue clara en el conjunto madridista, sobre todo por la segunda. El Madrid pasó a tener cierto dominio de las ocasiones, obligando a Oblak a intervenir para blocar una volea de Kroos y otro, en dos tiempos, a Rodrygo. 

Final trepidante en el derbi madrileño

Brahim fue el encargado de levantar a todo el Bernabéu con una jugada de fantasía que no pudo terminar acertadamente: Tras un caño a Mario Hermoso, rompió a Witsel con una finita y mandó un disparo desviado por el palo largo. El Atlético reaccionó con una ocasión clarísima tras una pérdida de Mendy que acabó en un pase atrás de Correa para que Antoine Griezmann, que no había tenido la incidencia que quería, se hiciera con un remate acrobático que repelió, 'in extremis', Lunin. 

La victoria parecía encaminada a quedarse en cara, pero el gran 'mal' de los madridistas, en las jugadas aéreas, acabó pasando factura. En el 90+3', tocó de cabeza Memphis y el balón quedó flotando en el aire. En medio de la indecisión de Nacho y Carvajal, Marcos Llorente mandó un testarazo para vencer, esta vez sí, a Lunin y poner las tablas en el último suspiro del encuentro.