Del Clásico de este domingo entre Real Madrid y FC Barcelona quedaron muchas 'mini' historias con respecto al rendimiento de los jugadores. No se puede tapar que, a pesar de las polémicas del choque, el cuadro entrenado por Xavi Hernández firmó uno de sus peores partidos de la temporada y que mostró su versión más gris. Una actuación con muy poco que rescatar, pero sí mucho por analizar para mejorar. 

Lo único que le queda al Barça después de este enfrentamiento es trabajar en lo que han fallado contra el eterno rival, que no fue poco. Es un momento de extrema reflexión en el que los azulgrana se ven contra la espada y la pared; porque es la única vía para dejar atrás el mal sabor de boca y enfocarse en ganar la mayor cantidad posible de partidos desde ahora. 

Uno de los puntos en los que perdió el Barça fue en el centro del campo. Y fue donde el Madrid estuvo más cómodo, por mérito de sus tres centrocampistas que leyeron a la perfección el partido y que sirvieron de ancla para ordenar al resto del equipo, para temporizar y dirigir; algo que los azulgrana no tuvieron. Uno de los grandes señalados, sin lugar a dudas, fue un Sergio Busquets que se mostró incapaz de servir como líder del equipo. 

El de Badía fue uno de los más discutidos del Barça este domingo, con diferencias. Fue el primer señalado en el 1-0 del Real Madrid, puesto fue incapaz de detener a Toni Kroos (que no es un jugador veloz, en cualquier caso) y llegó tarde a derribarle. Y es que el teutón, incluso así, fue capaz de dar el pase con el que Vinícius se fue en carrera para rematar ante Ter Stegen. El rechace lo cazó un Karim Benzema que puso punto y final a su sequía goleadora. 

'Busi' volvió a aparecer, también, en la foto del segundo gol. Estaba hundido. Llegaba tarde constantemente o simplemente no llegaba. El planteamiento del Madrid lo dejó muy protegido y sin capacidad de orquestar el juego, pero tampoco le benefició lo que planteó Xavi. Un cúmulo de despropósitos que acabó con una actuación desesperante del capitán del Barça, que acabó siendo sustituido en la segunda mitad. 

Un Toni Kroos diferencial 

El centrocampista dio sentido al juego del Madrid y dejó una exhibición en toda la norma. Golpe de autoridad de un futbolista que ha sido muy criticado, pero que está viviendo un comienzo de temporada sensacional. Para el Madrid fue clave en el Clásico y dejó la sensación de que el equipo estaba en sus espaldas. El timing, la precisión, y capacidad de ubicarse en el momento indicado fueron las 'marcas' de un jugador que se está ganando a pulso la renovación con el cuadro madridista.