Cuando se pensaba que ya nada podía a ser peor, y que el equipo se levantaría para conquistar el resto de triunfos que les quedaba en la temporada, terminó sucediendo todo lo contrario. El FC Barcelona cayó, en la jornada 37 de LaLiga, ante el Celta de Vigo en el Camp Nou (1-2), despidiéndose así de cualquier posibilidad de hacerse con el doblete.
De sus últimos cinco compromisos disputados, claves para la lucha por el liderato de LaLiga y con ello la consecución del título, el Barça perdió en dos, empató dos y ganó en uno con un resultado apretado (2-3 ante el Valencia). Los de Ronald Koeman fueron incapaces de defender un resultado a favor que los catapultara a la cima del torneo domiciliario, dejando libre el paso a sus rivales: Atlético de Madrid y Real Madrid.
Despidiéndose de cualquier atisbo de posibilidad de campeonato tras una segunda mitad de temporada que había devuelto las esperanzas al barcelonismo, ahora el panorama se ha ennegrecido. La continuidad de Koeman en el banquillo del club azulgrana ya no está asegurada, la afición pide su partida inmediata luego del papel desempeñado por el equipo.
Koeman está ahora en el ojo del huracán. Es señalado y burlado a través de las redes sociales. Atrás quedó la reestructuración eficiente del conjunto y la inclusión de jóvenes joyas al primer equipo, que sorprendieron a todos de manera grata. El holandés le abrió las puertas a jugadores como Óscar Mingueza, Pedri, Ilaix Moriba, Sergiño Dest, y cada uno de ellos le ha respondido de gran manera.
Sin embargo, ahora todo parece haber cambiado. El papel desempeñado por el equipo junto con sus planteamientos técnicos de cara a los últimos compromisos del Barça en la temporada, decepcionaron al barcelonismo, por lo que ahora piden su despido y con ello la llegada de un técnico que salve al conjunto y lo catapulte nuevamente a la élite del fútbol europeo.
Cambios importantes
Joan Laporta sabe bien que el club necesita un cambio trascendental, que lo devuelva a la cúspide de donde cayó y lamentablemente no ha podido volver a alcanzar. Es por tanto que el nuevo presidente del FC Barcelona tiene planes de hacerse con los servicios de grandes jugadores, para que el Barça desempeñe un papel importante en el torneo continental de clubes de máximo prestigio.
Los resultados del fin de temporada eran claves para determinar la continuidad de Koeman en el banquillo culé. El éxito o el fracaso del proyecto dependía de lo que cosechó ahora el Barça durante los últimos cinco choques disputados. Ahora, el futuro del técnico holandés en el club azulgrana está en el aire. Algunos están dispuestos a otorgarle su voto de confianza, mientras que otros desean su despido. Finalmente, Laporta tiene la decisión en sus manos.