Es innegable que la irrupción de Jude Bellingham en LaLiga ha sido todo un escándalo. El mediocentro inglés está demostrando un nivel increíble y se ha convertido en la máxima estrella del Real Madrid. El jugador llegó a la capital por 103 millones de euros más 40 en bonos y ha demostrado que vale mucho más de lo que los merengues pagaron por él. Tanto es así que actualmente el centrocampista ha igualado el valor de mercado de jugadores de la talla de Kylian Mbappé o Erling Haaland, con un valor de 180 millones de euros.

El internacional inglés se ha convertido en la piedra angular del proyecto de Carlo Ancelotti y, pese a ser un jugador que llega en segunda línea, acumula 17 goles en 21 partidos (13 en liga y 4 en Champions). Con estas cifras, se puede decir que es la mejor temporada de toda su carrera, ya que en tan solo la mitad del curso ha pulverizado su récord de goles con el Borussia en una campaña completa (14) y está a solo nueve de igualar los 28 que anotó sumando sus cuatro temporadas como profesional.

Una gran revalorización

Todos estos logros y el gran nivel demostrado lo han convertido en el segundo futbolista más valioso de toda la historia. Bellingham, en su llegada a la capital, tenía un valor de mercado de 120 millones de euros y, con solo media temporada portando la elástica merengue, se ha revalorizado hasta llegar a los 180 millones, igualándo a jugadores de la talla de Mbappé y Haaland, teniendo en cuenta los valores de Transfermarkt.

Merece la pena mencionar que solo hay un futbolista en toda la historia que ha alcanzado un valor de mercado superior al del inglés, y fue el propio Kylian Mbappé en su segunda temporada como jugador del PSG, que llegó a alcanzar los 200 millones con apenas 19 años.

Ahora, el 'todoterreno' blanco afronta el parón navideño como pichichi de LaLiga. No obstante, ha puesto una 'marcha menos' en este mes de diciembre, en el que ha protagonizado más acciones polémicas que decisivas para su equipo. El inglés está a una tarjeta amarilla de ser suspendido en liga y tendrá que ser cauteloso para que su equipo no se quede sin su jugador más diferencial en lo que va de temporada.