LASL FALTAS CONTRA EL TOTTENHAM
La prueba más clara de que este Real Madrid no tiene sangre
Publicación:1/11/2017 - 23:02h
Actualización:1/11/2017 - 23:02h
El Real Madrid no corre igual que antes. Sea por falta de intensidad o por cansancio acumulado, lo cierto es que los blancos no estuvieron a la altura de los 'spurs' en Wembley. Y los datos lo dicen bien claro: sólo una falta cometida en la primera mitad
El Real Madrid está irreconocible. Uno de los aspectos que siempre le había caracterizado, al menos durante los últimos años, era la intensidad y dureza a la hora de defender, sin permitir que sus rivales pudieran jugar con facilidad cerca de la portería.
Frente al Tottenham, sin embargo, volvió a quedar demostrado que, sea por falta de actitud o por el cansancio acumulado, los hombres de Zidane no corren lo suficiente ni se implican con la intensidad necesaria como para cortocircuitar el juego rival. Los 'spurs' se movieron a placer en el centro del campo y en el flanco de ataque este miércoles, tejiendo jugadas peligrosas ante la pasividad blanca.
El Real Madrid terminó la primera mitad perdiendo sólo 1-0 en Wembley, pero la prueba de la falta de intensidad merengue fue que el conjunto blanco sólo hizo una falta en toda la primera parte. Cierto es que los jugadores blancos suelen emplearse con limpieza a la hora de robar balones, pero no deja de ser llamativo que, en un primer acto en que el Tottenham fue superior, el Real Madrid sólo hiciese una falta.
El Real Madrid, con mucho por mejorar
El Tottenham, por su parte, cometió cinco faltas en sus intentos de presionar de manera constante la salida de balón de los blancos para, de esta manera, encerrarles y evitar que les cogieran al contragolpe, en una táctica que suele emplear el FC Barcelona en sus partidos.
Está clara la diferencia de intensidad entre los dos equipos, y cualquiera que haya visto el partido de este miércoles podrá haberlo comprobado. La única falta de la primera mitad para el Real Madrid la cometió Benzema en el tiempo añadido. Sin lugar a dudas, mucho hay por hablar en el vestuario blanco para sincronizar el engranaje de juego del equipo de cara a los próximos compromisos en el calendario.