El Real Madrid se abona al KO en octavos de Champions League

El Real Madrid logró a principios de este lustro un hecho histórico: ganar tres Champions League​ consecutivas. Fueron victorias atípicas, logradas pro un equipo muy inferior al FC Barcelona en LaLiga Santander pero que a base de decisiones arbitrales, tandas de penaltis, errores de los porteros rivales o jugadas afortunadas, logró levantar la 'orejona' durante tres años seguidos.

Pero parece que esa victoria contra el Liverpool -regalada por los errores de Loris Karius y marcada por una llave de judo de Sergio Ramos a Mohamed Salah que dejó en el dique seco a la estrella egipcia- acabó con la suerte que le quedaba al Real Madrid en su competición fetiche. Tras ello, el equipo madridista acumula dos eliminaciones seguidas en octavos de final.

La temporada pasada, los blancos cayeron contra el sorprendente Ajax de Erik ten Hag, Frenkie de Jong y Matthijs de Ligt. En Ámsterdam, el conjunto madridista consiguió ganar de manera injusta pese al buen juego de los 'ajacied, pero en el Santiago Bernabéu, sin Sergio Ramos, al cuadro blanco se le vieron las costuras: 1-4 a favor de los holandeses para dar paso a una humillación histórica.

Un año después, la historia se repitió en la misma ronda, aunque esta vez el Real Madrid no partía como favorito como sí lo hacía contra el Ajax. El Manchester City, campeón de la Premier League en las dos últimas temporadas, llegaba al Santiago Bernabéu dispuesto a dar un golpe sobre la mesa y lo hizo: victoria por 1-2 que incluso fue corta para lo visto sobre el terreno de juego y dejando a los blancos sin Sergio Ramos para la vuelta.

Culminación del desastre

Meses después de esta victoria de los de Pep Guardiola en el Santiago Bernabéu, Real Madrid llegaba al partido de vuelta con la moral por las nubes después de haber ganado todos sus partidos de Liga después del parón por el coronavirus. Victorias sin un juego brillante, marcadas por el juego apático y por las 'ayudas' de las decisiones de los árbitros con extrañas interpretaciones del VAR.

Pero en Manchester, los blancos se llevaron un tortazo de realidad y el castillo de naipes que se había montado el madridismo se derrumbó. El Manchester City volvió a ser superior al Real Madrid y volvió a ganar por el mismo resultado: 2-1. Segunda eliminación consecutiva de los blancos en octavos de final para demostrar que, tal vez, esas tres Champions League seguidas fueron productos de una alineación de los astros.