Los jugadores del FC Barcelona Memphis Depay y Frenkie de Jong no han conseguido dirigir a Holanda a los cuartos de final de la Eurocopa 2021. Los neerlandeses, con mucho sufrimiento cayeron a República Checa por la mínima, con diez jugadores en el campo. Fueron Holes y Schick quienes marcaron la diferencia en el Puskas Arena para evitar que los de Franck de Boer se fueran a la próxima fase del campeonato continental.
En Budapest, los neerlandeses saltaron al campo con ganas de dominar y con un juego muy vertical, como acostumbran, pero sin tanta creación desde el centro del campo. Ante los checos, Holanda optó por un despliegue más directo y, en los primeros compases del encuentro, la presión fue asfixiante, pero República Checa supo reaccionar, abriendo mucho el campo y enlazando posesiones interesantes.
La 'esperanza' de los holandeses era la velocidad de sus jugadores, pero no le bastó para abrir la lata. Los de De Boer pudieron dar un paso al frente cuando De Jong comenzó a pedir más el balón, provocando que su selección se estirara más, pero sin efectividad. Dumfries tuvo una oportunidad clara después de romper por dentro, mandar un balón largo a la espalda. Vacilik salió mal y un defensa logró tapar para mandarla al córner.
La 'oranje' era dominador absoluto, pero terminaron dejando todo en poseisión, sin acción. Memphis Depay era el jugador más activo, más incisivo, pero se notó que, cuando no puede tener su conexión letal con Georgino Wijnaldum,desconectado por completo, pierde efectividad. Sin embargo, antes del descanso, estos dos consiguieron incomodar y el culé mandó un pase preciso al de PSG, pero su tiro se fue desviado. De cualquier forma, estuvo adelantado.
Desconexión total de Holanda en la segunda parte
La continuación del encuentro fue una verdadera pesadilla para los de De Boer, sobre todo después de que Mathijjs de Ligt se marchara expulsado, con roja directa, a los diez minutos de la reanudación. El central neerlandés tropezó y evitó el avance de Masopust con la mano. Lo revisaron el VAR y el árbitro principal para mandar a la calle al jugador de la Juventus. Y allí Holanda se vino abajo.
Los 'oranje' no pudieron reaccionar y se encontraban desubicados en el campo, sin oportunidades de crear peligro y República Checa aprovechó la perdición de los neerlandeses. Antes del 70, Barak puso una falta al segundo palo, la ganó imperial Kalas, que llegó al área pequeña y Holes, de cabeza y tras tocar en un defensor, abrió el marcador en Budapest. El gol fue un nuevo jarro de agua fría.
No hubo reacción en Países Bajos y el segundo cayó diez minutos después. En el 80, llegó un balón áreo que no pudo despejar la defensa holandesa. El balón se lo llevó Holes, que apuró por línea de fondo, lo dejó atrás y llegó Schick para marcar con un disparo potente con la zurda. Su remate fue al primer palo para terminar de hundir a los de De Boer y ganarse su pase a los cuartos de final de la Eurocopa.