La épica impulsó a Portugal ante Francia para llevarse la Eurocopa

Con todo en contra desde el primer cuarto de hora tras la lesión de Cristiano, Portugal consiguió hacerse con la primera Eurocopa de su historia habiendo ganado únicamente un partido de los siete que llegaron a disputar en el torneo. Y lo hicieron ante la gran favorita, una Francia que fue infinitamente superior a su rival pero que falló muchas ocasiones.

El primer tiempo (y casi todo el partido) quedó marcado por la acción que tuvo lugar en el minuto nueve. La estrella de Portugal Cristiano Ronaldo sufría un golpe fortuito con Payet en el centro del campoque, después de dos intentos y de probarse, acabó dejando al madridista con lágrimas en los ojos y abandonando el terreno de juego en camilla. Antes del incidente Francia había impuesto un ritmo muy alto, al igual que ante Alemania.

Todo ese primer tiempo el partido fue de los galos, que tuvieron en las botas de Antoine Griezmann y de Paul Pogba el gol que no llegó. En el segundo tiempo los locales siguieron igual, marcando la pauta y sobre todo demostrando una potencia física en el medio del campo ante la que nada podían hacer los usos. Por eso Santos dio entrada a Joao Moutinho para apostar por jugar a fútbol, algo que no habían hecho en los seis encuentros anteriores.

Algo de agradecer pues gracias a eso se vieron las mejores ocasiones por ambos bandos, aunque Portugal no acababa de poner en aprietos a Hugo Lloris. Paul Pogba se deshacía con dos quiebros de su par y ponía un centro preciso para la cabeza de Griezmann que remataba sólo pero el esférico se iba rozando la escuadra. En el 79 aparecía en el otro área Nani para con un centro-chut poner en apuros al guardameta galo y tener la mejor ocasión de todo el encuentro para su equipo.

En la prórroga Portugal creció y Francia se desinfló

El central del FC Barcelona Samuel Umtiti, que había cuajado un partidazo hasta el momento, se colaba en ataque. Sin que nadie le saliera a su paso, el zaguero llegó hasta la medular del área rival controlando el esférico para acabar cediéndoselo a su compañero Sissoko cuyo chut potente volvía a salvar un espectacular Rui Patricio. Con ya el monopolio del balón para Francia, los últimos diez minutos fueron un asedio que a punto estuvo de conseguir sus frutos tras una jugada mágica de Oliver Gignac, que le hizo un traje a Pepe y su disparo se fue al palo a falta de un minuto.

El primer tiempo de la prórroga fue casi un armisticio entre ambos equipos que se pasaron los primeros diez minutos sin querer hacerse daño. Y el segundo, salvo un remate al larguero de Guerreiro que casi rompe el corazón de la afición "blues", no ofrecía nada nuevo hasta que Éder rompía las tablas con un soberbio gol desde fuera del área. Increíble golazo del delantero luso que ejemplificaba mejor que nadie la épica de los suyos.

El Dios de la fortuna esta vez no tiró los dados de una Francia que si bien ganó su última Eurocopa en el año 2000 con un gol de oro, en esta ocasión las cosas fueron totalmente diferentes.