Argentina y Uruguay empataron el amistoso que disputaban este lunes en Tel Aviv, en el que los jugadores del FC Barcelona fueron protagonistas. En un duelo por la paz que tenía como objetivo normalizar las relaciones y el trato entre las diferentes creencias, Leo Messi y Luis Suárez confirmaron con un gol y una asistencia por cabeza que, a pesar de las estrellas que se reunieron en el Bloomfield Stadium de Israel, su calidad es la que manda.
Como buen clásico entre selecciones sudamericanas, el cartel de amistoso quedó sólo para la previa, y como ocurrió hace apenas unos días con Brasil, sobre el terreno de juego hubo tensión competitiva a e incluso algo de calentura. La 'albiceleste' trató de dominar a través de la posesión en un primer tiempo algo trabado, pero más allá de los fogonazos de los culés, el fútbol y las ocasiones se reservaron más bien para la reanudación.
En los 45 minutos iniciales hubo atasco en ambos bandos, unos porque no lograban encontrar al '10', su líder y director de operaciones, y los otros porque se centraron en contener al todopoderoso rosarino con marcajes escalonados y no estuvieron inspirados a la hora de atacar. El plan funcionó a medias porque Messi estuvo muy aislado, y porque cuando más falta hacía, apareció Suárez para regalar un gol a Edinson Cavani.
No se había pasado por mucho de la media hora de juego cuando los pupilos de Óscar Tabárez se pusieron en ventaja. Lucas Torreira sirvió un balón picado para el '9', que ganó la espalda a la retaguardia argentina y lo metió raso y de primeras al corazón del área. Allí se lanzó con todo el ariete del PSG, que batió al cancerbero y dejó a sus adversarios en discusiones. Leo ejercía de capitán y daba instrucciones para ordenar a los suyos, y Paulo Dybala veía como le anulaban un tanto por un control previo con la mano.
Suárez abre brecha pero Messi sostiene a Argentina
Tras el paso por vestuarios empezó a mandar Argentina, que fruto de un ajuste táctico ya se pudo dejar llevar por Messi. Lionel Scaloni le colocó en la media punta, desde donde empezó a generar un juego que echó en falta algo de mordiente de sus compañeros. Su amigo Sergio Agüero, eso sí, no perdonó, y tras un tiro libre colgado a la zona de castigo, conectó un testarazo a bocajarro para superar a Martín Campaña.
Cuando más sufría Uruguay, Luis Suárez dio una muestra de carácter personal y colectivo, confirmando que la actitud de los charrúas es un argumento sólido para resolver partidos. Al punta le hicieron una falta en la frontal y tiró de galones para pedirse el lanzamiento, que clavó cerca de la escuadra de Esteban Andrada con algo de colaboración del arquero, que dio la sensación de poder hacer algo más para detener el disparo.
Con el 'Kun' y Dybala desesperados por Campaña y su propia falta de puntería, la última bala 'albiceleste' fue Lautaro Martínez, que con un taconazo forzó una pena máxima de Martín Cáceres. Habían insistido los argentinos y lo había hecho su mayor estrella, que esta vez no repitió el error que a punto estuvo de cometer con Alisson. El penalti lo lanzó raso y por su izquierda, para, ya en el descuento, devolver las tablas al marcador. Argentina 2, Uruguay 2. Messi 2, Suárez 2.