En míster de la selección de Dinamarca, Kasper Hjulmand, llegó a darle un abrazo al delantero del Barcelona Martin Braithwaite cuando se retiró, sustituido por Cornelius en el partido entre Rusia y Dinamarca.
El Parken, que se ha visto demasiado sensible desde el desmayo de Eriksen, le despidió como se despide a un héroe que se lo deja todo en la batalla. Porque así es el atacante danés. No es alguien que dude en hacer una carrera si tiene una oportunidad y es todo sacrificio. Eso sí, no encuentra el gol. Y eso es lo que permitiría incrementar su valor de mercado, que actualmente estaría rondando los nueve millones de euros.
Para nadie es un secreto que el Barça no cuenta, evidentemente, con Braithwaite desde finales de la temporada pasada. Menos aún con las llegadas al club de los delanteros Sergio Agüero y Menphis Depay. El danés tiene el aprecio de muchos dentro de la plantilla de jugadores, pero su bajo número de goles es algo que le pesa más a la directiva y al cuerpo técnico.
Los agentes del futbolista ya saben que en la escuadra catalana ya no cuentan con él, pero los directivos del Barça tendrán que esperar, ya que Braithwaite en lo único que piensa ahora es en la Eurocopa, en la que Dinamarca ya se ha metido en la segunda fase con un buen fútbol y con la esperanza de eliminar a Gales en octavos, pisar tierra de cuartos y soñar con lograr más. Lo cierto es que hasta que no termine la Eurocopa, no tomará una decisión.
Hay equipos en la Premier League que están interesados en ficharlo, pero el delantero tampoco va a entregar su salida con felicidad. Si encuentra algún buen proyecto deportivo competitivo y que pueda tener espacio para él, no pondrá problemas y se irá con un comportamiento ejemplar como el que ha tenido mientras ha estado en el vestuario del Barça. Pero si esa opción no llega, tampoco piensa ponerlo fácil.
Feliz de jugar con su selección
Pese a su bajo número de goles, para el futbolista es todo un orgullo ser parte de su selección. "Uno sueña con jugar en los equipos más grandes, pero lo más grande para mí es jugar en el Parken con este ambiente. Soy jodidamente afortunado, estoy muy orgulloso de ser danés", afirmó luego del partido ante Bélgica.
Además, le dedicó unas palabras a Christian Eriksen, que vio el encuentro desde el hospital. "Empezamos muy bien. Había muchos interrogantes, pero demostramos lo fuerte que somos mentalmente. Queríamos jugar por Christian y por toda Dinamarca", agregó.